MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
El exsecretario Jeong Ho Seong, a cargo de los asuntos privados de la presidenta de Corea del Sur, Park Geun Hye, ha reconocido este miércoles que él mismo filtró información clasificada a la confidente de la mandataria cuya detención destapó el escándalo de corrupción que ha llevado a su destitución.
Jeong, que manejaba datos sobre cuestiones diplomáticas y de seguridad del Gobierno surcoreano y quien ha declarado este miércoles ante el equipo de fiscales que investiga el caso, ha reconocido que ofreció información secreta a Choi Soon Sil, si bien ha señalado que su única intención era la de ayudar a Park.
"Reconozco, de forma generalizada, los cargos presentados en mi contra y las declaraciones que he hecho a la Fiscalía, pero simplemente estaba tratando de asistir a la presidenta", ha señalado el asesor, al que se le considera una de las tres personas del círculo más cercano a Park.
Jeong ha asegurado que la propia Park le pidió "escuchar las opiniones de Choi" e incorporarlas "cuando fuera necesario", si bien ha insistido en que en ningún momento le dio órdenes de "enviar uno u otro documento".
"Hice todo lo que pude por asesorar a la presidenta, incluso en las cosas más nimias, y me parte el alma escuchar que he conspirado junto a ella", ha concluido, según recoge la agencia surcoreana de noticias, Yonhap.
Park, de 64 años, está acusada de ponerse de acuerdo con su confidente y amiga, procesada por la Justicia surcoreana, para presionar a varias empresas --entre ellas Samsung-- con el fin de que ofrecieran donaciones a dos fundaciones creadas para respaldar sus iniciativas políticas.
La mandataria ha descrito a Choi como una amiga en la que se apoyaba en los momentos difíciles. Los investigadores señalan a Choi como el 'cerebro' de esta trama de corrupción, una acusación que su abogado ha calificado de "ficción".
Park fue destituida por la Asamblea Nacional por su presunta implicación en una serie de infracciones cometidas por su Choi, quien ha sido acusada de abusar de sus lazos con la presidenta para ganar varios favores empresariales y personales a pesar de no ostentar ningún puesto gubernamental.
