ASUNCIÓN, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno paraguayo ha descartado de plano negociar con el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) después de que la guerrilla haya propuesto este martes intercambiar a un suboficial de Policía secuestrado el pasado mes de julio por seis de sus guerrilleros encarcelados.
"Ellos hablan de un supuesto canje de seis a quienes ellos consideran presos políticos contra la liberación de Edelio Morínigo, que por supuesto es algo impensable (...), categóricamente no va a haber canjes", ha declarado este miércoles el ministro del Interior, Francisco De Vargas, en declaraciones a la emisora 780 AM recogidas por la agencia IP.
Ayer, supuestos miembros del EPP dejaron un comunicado de seis hojas en las inmediaciones de la casa del suboficial secuestrado en el departamento de Concepción. Según 'ABC Color', la guerrilla da hasta el 14 de octubre para cumplir con sus exigencias o de lo contrario amenazan con ejecutar al agente.
Según ha indicado hoy De Vargas, se está investigando la autoría y el contenido del comunicado, aunque ha reconocido que hay dados que hacen presumir que pertenece al grupo criminal. "La negociación es algo categóricamente descartado, pero en caso de que ésta se realice estamos seguros que estos criminales no cumplirán con ninguna promesa que hagan", ha aseverado.
SIN DATOS DE ARLAN FICK
El ministro ha indicado que en la nota no se hace ninguna mención a Arlan Fick, el adolescente secuestrado por el EPP el pasado 2 de abril en la zona de Arroyito, en el departamento de Concepción, y del que no se han tenido noticias desde entonces.
"Según informes de inteligencia el oficial Morinigo y Arlan están en manos del primer anillo del EPP (...), la nota no tiene como objetivo real el canje, lo que ellos buscan es una suerte de argucia para responsabilizar al Gobierno de una eventual crisis", ha remachado, asegurando que las Fuerzas de Tareas Conjuntas no van a abandonar la zona de influencia del EPP.
El viceministro del Interior, Javier Ibarra, se ha pronunciado en la misma línea. "La política del Gobierno es que no se negocia con delincuentes comunes ni de ninguna laya", ha defendido en declaraciones a otra emisora.
"Por más que duela y, esto inclusive puede afectar intereses subjetivos, el interés general prima sobre el particular", ha defendido. "No se puede en un Estado serio, donde somos más de siete millones de habitantes y con un sistema democrático, ceder ante la presión de intereses comunes", ha añadido.
