BRATISLAVA, 13 Feb. (Reuters/EP) -
Un tribunal regional de Bratislava se ha negado a excluir al primer ministro de República Checa, Andrej Babis, de la lista de agentes de la Policía Secreta de la era comunista, la StB, en la que fue incluido por el Instituto de la Memoria Nacional de Eslovaquia.
Este fallo, que se emitió el pasado 30 de enero pero que no se ha conocido hasta este martes, pone fin a una larga batalla judicial que comenzó cuando Babis demandó al Instituto para exigir que le retirara de dicho listado.
Los tribunales inferiores le dieron la razón basando en los testimonios presentados por los abogados de Babis, pero su suerte cambió cuando el Tribunal Constitucional determinó que los testigos no eran fiables.
El Constitucional reenvió el caso al tribunal regional de Bratislava que finalmente ha dictaminado contra Babis, por lo que, al menos de momento, seguirá figurando como agente de la StB.
Babis ha anunciado que presentará una nueva demanda, aunque no ha aclarado los detalles. "Demandaremos hasta la muerte porque estamos en lo cierto", ha dicho a la versión digital del diario local 'MF Dnes'.
El primer ministro nació en lo que ahora es Eslovaquia y se trasladó a Praga en 1990, donde construyó su imperio agroquímico hasta irrumpir en la política checa en 2011.
Babis ha reconocido que tuvo reuniones con agentes de la StB durante la década de 1980 en la antigua Checoslovaquia cuando era miembro de Partido Comunista y trabaja en comercio exterior, pero asegura que solo hablaron de economía.
A pesar de que el periodo comunista todavía es un tema sensible en República Checa, eso no ha impedido a Babis escalar hasta el Gobierno. Su partido, ANO, ganó con holgura las elecciones generales de octubre.
Sin embargo, la Justicia checa le acusa de usar fraudulentamente dos millones de euros procedentes de subvenciones de la UE. El Parlamento consiguió aprobar una moción de censura en su contra pero el apoyo del presidente del país, Milos Zeman, le ha mantenido en el cargo. Zeman ha ratificado su respaldo a Babis pese a la última decisión judicial.
