PARÍS, 8 Dic. (Reuters/EP) -
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha llamado este viernes a todas las potencias extranjeras a dejar de interferir en la política de Líbano y ha llamado a todas las partes en el país a cumplir plenamente el pacto de mantenerse al margen de los conflictos de la región.
"Para que Líbano esté protegido de las crisis regionales es esencial que todos los partidos libaneses y actores regionales respeten el principio de no injerencia", ha sostenido Macron al inicio de una reunión internacional sobre el país en París.
"El encuentro de hoy debe mostrar la voluntad de la comunidad internacional de que la política de disociación regional sea efectivamente aplicada por todos en el país", ha añadido.
París acoge este viernes una reunión del Grupo Internacional de Apoyo a Líbano que componen los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU. A la cita asisten, entre otros, el primer ministro libanés, Saad Hariri, y el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson.
Líbano se vio sumido en la crisis el pasado 4 de noviembre, después de que Hariri dimitiera desde Arabia Saudí, asegurando que temía ser asesinado y criticando a Irán y al partido-milicia chií libanés Hezbolá.
Tras la presión internacional y negociaciones entre las distintas facciones políticas, finalmente este martes rescindió su renuncia y su gobierno de coalición, del que forma parte Hezbolá, reiteró su política de estado de no injerencia en conflictos en países árabes.
La política libanesa de "disociación" fue declarada en 2012 para mantener al país fuera de conflictos regionales como la guerra civil en la vecina Siria. Pese a ello, Hezbolá está muy implicado en esta contienda, donde respalda al presidente sirio, Bashar al Assad, con miles de combatientes.
"La clave de la declaración final será el apoyo a la política de disociación", ha explicado un diplomático francés. Según ha dicho, aunque no se mencionará a ningún país, el mensaje es que tanto Arabia Saudí como Irán no deben influir en las políticas libanesas y que Hezbolá debería contener sus actividades regionales. "El encuentro del viernes no es anti-saudí o anti-iraní, es pro-Líbano", ha subrayado.
"La política de disociación está impulsada por mi Gobierno y adoptada por todos sus componentes políticos y nos permitirá mantener nuestra unidad nacional", ha afirmado Hariri en su intervención. "La estabilidad de Líbano puede parecer como un pequeño milagro dados los muchos conflictos que desestabilizan la región, pero se mantiene al coste de sacrificios, diálogo y compromiso", ha añadido.
Los asistentes a la reunión también apoyarán esfuerzos para fortalecer el Ejército libanés, convocar una conferencia de inversión para Líbano una vez se celebren las elecciones legislativas, apoyar las reformas económicas y la gestión por el país de la presencia de millones de refugiados sirios.
