NUEVA YORK, 1 May. (Reuters/EP) -
Los activistas y sindicalistas que han participado en las marchas del 1º de Mayo en Estados Unidos han centrado este año sus reivindicaciones en el rechazo a la política migratoria del presidente estadounidense, Donald Trump, y su promesa de aumentar las deportaciones. En Estados Unidos el 1º de Mayo no es festivo y aún así se esperan las marchas más multitudinarias desde que Trump llegó a la Casa Blanca.
Unos 500 manifestantes han marchado esta mañana por el centro de la isla neoyorquina de Manhattam y se han concentrado frente a las sedes de Wells Fargo y JPMorgan Chase & Co. Doce manifestantes han sido detenidos, ha explicado un portavoz de Make the Road New York, un grupo de defensa de los inmigrantes que tiene 20.000 miembros.
Los dos bancos fueron blanco de la protesta por negocios con compañías privadas que construyeron o dirigen centros de detención de inmigrantes para el Gobierno, según José López, codirector de Make the Road New York.
"El mensaje de hoy era detener la financiación a los centros de inmigrantes", ha explicado López. "Éste va a ser el primero de muchos ataques contra estas corporaciones que, hasta que dejen de trabajar con este Gobierno, seguirán estando en nuestra lista", ha advertido.
La concentración más importante está prevista para esta tarde en Nueva York, concretamente en la plaza Foley de Manhattan, donde habrá presentaciones musicales y discursos de líderes sindicales e inmigrantes que viven ilegalmente en el país.
Algunas organizaciones afines a Trump han anunciado también su intención de salir a la calle para reivindicar la labor de gobierno del nuevo inquilino de la Casa Blanca.
