MIR ALI (PAKISTÁN), 16 Nov. (Reuters/EP) -
El Ejército paquistaní ha matado a 1.200 presuntos milicianos en su ofensiva contra los talibán durante los últimos cinco meses, reduciendo seriamente la capacidad del grupo de llevar a cabo ataques, según han revelado altos cargos durante una inusual visita a la zona de conflicto.
La operación en curso ha tenido como objetivo Waziristán del Norte, una región montañosa fronteriza con Afganistán y que ha servicio como puesto para lanzar ataques tanto en Afganistán como en Pakistán.
En el centro de Mir Alí, la segunda mayor ciudad en la región, apenas hay edificios afectados por los combates. El general Zafarulá Jan, el oficial a cargo de Waziristán del Norte, ha subrayado que la ola de violencia que se preveía en respuesta de la operación no se ha producido.
"Se han logrado logros significativos", afirmó este sábado. Según dijo, el Ejército ha matado a casi 1.200 milicianos desde que lanzó la operación. Otros 230 han sido detenidos y unoas 132 toneladas de explosivos han sido incautadas hasta ahora, ha precisado.
Asimismo, las fuerzas de seguridad se han incautado de grandes cantidades de armas, munición y muchos vehículos. Muchas de las zonas en las que ha entrado el Ejército han sido minadas, según Jan, y los soldados están yendo casa por casa para desactivar las bombas. "Las han colocado en casas, las han colocado en las calles, las han colocado en los árboles", ha precisado el general.
Jan no quiso entrar a valorar cuánto tiempo se prolongará la operación. Buena parte de la población civil de Waziristán del Norte, estimada en alrededor de un millón de personas, recibió órdenes de abandonar sus hogares antes de la ofensiva. Muchos se enfrentan ahora al duro invierno lejos de sus casas y negocios, dependiendo de la ayuda alimentaria.
