KIEV, 3 Mar. (Reuters/EP) -
Al menos tres militares ucranianos han muerto y otros nueve han resultado heridos como consecuencia de los bombardeos realizados por los milicianos separatistas prorrusos en el este de Ucrania, según han informado las Fuerzas Armadas ucranianas. Se trata del mayor balance de víctimas registrado en los últimos días.
Estas bajas ponen de manifiesto la fragilidad del alto el fuego que entró en vigor el 15 de febrero y que el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ha definido como la última oportunidad para lograr la paz con los separatistas.
Desde que comenzó oficialmente el cese de hostilidades, los combates han disminuido en el frente pero ambos bandos se acusan mutuamente de incumplir el acuerdo. Un portavoz militar de las fuerzas de Kiev ha dicho que los separatistas han atacado las posiciones de las fuerzas gubernamentales en 22 ocasiones en las últimas 24 horas.
"Se ha observado una intensificación de las operaciones militares del enemigo en la noche del 2 de marzo. Han disparado contra Peski con morteros y con sistemas antiaéreo en Avdiivka", ha señalado el portavoz militar ucraniano Anatoli Stelmaj, en referencia a dos localidades que han sufrido daños en las últimas horas.
Los líderes de Alemania, Francia y Ucrania han reclamado este lunes que la OSCE tenga un mayor papel como organismo supervisor del alto el fuego y de la retirada de armamento. El Parlamento de Kiev tiene previsto aprobar esta semana una solicitud de Poroshenko para reclamar el envío de fuerzas de paz a la zona de conflicto.
Los separatistas prorrusos han emplazado a los medios de comunicación que sean testigos de la retirada del armamento del frente de batalla aunque la OSCE ha dicho que no puede confirmar la retirada porque no tiene acceso al lugar en el que se habría situado el armamento.
