MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y la del Alto Comisionado para los Derechos Humanos en México han condenado este lunes los enfrentamientos registrados la semana pasada en una prisión de la ciudad de Acapulco que dejaron 28 muertos y tres heridos.
En un comunicado, las agencias han instado a las autoridades a establecer una rápida investigación que esclarezca lo ocurrido y que asegure justicia tanto a las víctimas como a sus familiares.
"Esta medida es una garantía de prevención de hechos similares, así como la sanción de los responsables", han señalado en un comunicado conjunto.
Asimismo, han recordado al Gobierno mexicano que tiene la obligación de tratar con dignidad y respeto a los Derechos Humanos y el deber de velar por la seguridad de los presos.
Al menos 28 presos murieron en una pelea entre grupos rivales en el interior de una cárcel de Acapulco, según el último balance de víctimas divulgado por las autoridades del estado de Guerrero, que también han confirmado tres heridos leves como consecuencia de estos hechos.
El enfrentamiento se inició a las cuatro de la madrugada del pasado jueves en un módulo de alta seguridad en el centro de Readaptación Social de Acapulco. Según un comunicado del Gobierno estatal, la pelea empezó "por la pugna permanente de grupos contrarios en el interior del penal".
Las fuerzas de seguridad localizaron cadáveres en varias áreas del centro penitenciario y procedieron a su evacuación, al tiempo que se inició el proceso de información a los familiares que se agolpaban en las inmediaciones a la espera de conocer los nombres de las personas fallecidas.
El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, dio orden de "llegar al fondo de los hechos y actuar con todo el peso de la ley contra los responsables de los diversos delitos". "Es importante señalar que también se investigan a todos los servidores públicos del sistema penitenciario", apostilló el Gobierno.
