MADRID, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha pedido este miércoles a las autoridades de Bangladesh que detengan la inminente ejecución de Mohamed Kamaruzzaman, líder del partido islamista Jamaat-e-Islami, opositor al actual gobierno.
El lunes pasado, el Tribunal Supremo de ese país rechazó la apelación de Kamaruzzaman, quien fue condenado a la horca por crímenes de lesa humanidad cometidos presuntamente durante la guerra de independencia de 1971, en un juicio "con muchas irregularidades que no se ajustó a los estándares internacionales", según denuncia el organismo internacional.
Kamaruzzaman fue condenado por organizar la fuerza Al Badr, que respaldaba al Ejército de Pakistán durante la guerra y ha sido acusada de secuestrar, torturar y matar a combatientes, activistas e intelectuales.
La Oficina del Alto Comisionado ha agregado que durante mucho tiempo ha advertido que las autoridades del país "no deberían permitir las condenas a la pena capital", puesto que "existen muchas dudas sobre la imparcialidad de los juicios de ese Tribunal".
Desde su formación en 2010, esa instancia ha emitido catorce sentencias de muerte por crímenes de lesa humanidad y genocidio cometidos en 1971 a miembros de las organizaciones de oposición Jamaat-e-Islami y Partido Nacional de Bangladesh. Uno de los sentenciados fue ejecutado en 2013.
LA INDEPENDENCIA DE BANGLADESH
Bangladesh pasó a formar parte de Pakistán al acabar el régimen británico en 1947, pero se independizó en 1971 tras una guerra de nueve meses entre los nacionalistas de Bangladesh, apoyados por India, y el Ejército paquistaní.
Algunas facciones de Bangladesh, incluida Jamaat-e-Islami, se opusieron a la separación de Pakistán, pero el partido niega las acusaciones contra sus líderes por cometer atrocidades. Cerca de tres millones de personas murieron, de acuerdo con las fuentes oficiales, y miles de mujeres fueron violadas.
