La población de Liberia exige que el resultado de las elecciones sea el fin de la pobreza extrema en el país

Seguidores de Walsh en Monrovia, Liberia
REUTERS / THIERRY GOUEGNON
Actualizado: lunes, 23 octubre 2017 12:48

MONROVIA, 23 Oct. (Reuters/EP) -

Los ciudadanos de Monrovia, que viven hacinados en chozas en una de las mayores suburbios de Liberia, en el barrio de West Point, han exigido este lunes a las fuerzas políticas del país que las elecciones del próximo 7 de noviembre supongan el fin de su lucha diaria contra la pobreza extrema.

Ishmael Campbell, un pescador de 26 años que nació y se crió en este barrio de chabolas ha asegurado que los ciudadanos necesitan a un presidente que "esté ahí" porque la antigua presidenta "no ha aportado nada (...). Ninguna mejora, ningún desarrollo".

Al igual que la mayoría de los vecinos del barrio de West Point, Campbell vive en una chabola situada en uno de los minúsculos callejones en los que las casas están tan pegadas que apenas se puede avanzar sin chocar con el resto de viviendas.

Los dos candidatos a la presidencia del país son por un lado, George Weah, ex futbolista de la selección liberiana y balón de oro en 1995 y, por otro, el actual vicepresidente, Joseph Boakai, quien se enfrenta al reto de conseguir los máximos votos posibles para mantener la mayoría parlamentaria.

Aunque Boakai representa al actual partido en el Gobierno, se ha presentado durante la campaña electoral como el candidato ideal para el cambio, al tiempo que ha puesto de manifiesto sus humildes comienzos en un intento por distanciarse del actual Ejecutivo elitista al que el pueblo ha dejado claro que desprecia.

Muchos liberianos celebraron la llegada al poder en 2006 de la actual presidenta y Premio Nobel de la Paz Ellen Johnson Sirleaf, por conseguir mantener la paz en el país después del prolongado periodo de guerra civil. Sin embargo, los vecinos de West Point tienen una visión más crítica de los doce años de Gobierno de la mandataria.

Durante el mandato de Johnson Sirleaf, la epidemia de ébola demostró que la población carecía de acceso a servicios sanitarios, a lo que se unen los ataques de los militares contra los manifestantes que mostraron su oposición al orden público. Por otro lado, la crisis financiera global acabó con las esperanzas del país de convertirse de desarrollarse económicamente.

No obstante, el tamaño de la economía liberiana se cuadriplicó, principalmente gracias al mantenimiento de la paz. Aún así, la presidenta recibió fuertes críticas por corrupción.

Ni Boakai ni la presidenta son considerados como corruptos por la población. Sin embargo, a Boakai se le conoce como "Joe el dormilón" desde que se quedase dormido durante el ejercicio de sus funciones públicas, una de las razones por las que está encontrando poco apoyo en West Point. "No le importamos, solo se preocupa por sí mismo", ha agregado Campbell.

LA JUVENTUD DE LIBERIA QUIERE TRABAJAR

La ciudad de West Point es un bastión importante para Weah de cara a conseguir votos por la alta tasa de desempleo que existe. La mayoría de los residentes pasa las tardes arreglando redes de pesca o jugando a las damas.

"La juventud está en las calles, pero quieren trabajar", ha declarado Eugene Nyuti, de 35 años, al tiempo que ha afirmado que George Weah será el responsable de "empoderar a la juventud". Weah, que actualmente ocupa el puesto de senador, es conocido por muchas personas como 'El embajador' después que haya sido embajador de buena voluntad para UNICEF.

Las propuestas políticas de Weah son vagas, pero ha sostenido que entre sus objetivos está la mejora de las infraestructuras del país como las carreteras, por ejemplo. Sus opositores, sin embargo, han criticado su falta de experiencia política, a pesar del resultado favorable que consiguió durante la primera ronda al alcanzar un 38 por ciento de los votos, frente al 28 por ciento obtenido por si adversario, Boakai.

Los problemas de West Point son el eco de las desigualdades que caracterizan a Liberia, que ha desarrollado una fuerte dependencia de las donaciones extranjeras desde la guerra civil de 2003.

La red eléctrica que suministra energía al país, 'Electricity Corporation', ha tenido problemas para abastecer a todos los hogares de Monrovia, miles de personas en se conectan de manera ilegal a la red mediante la utilización de alambres.

Otra de las problemáticas a las que se enfrentan los ciudadanos de West Point son los residuos que arrastra el mar y que se quedan varados junto a sus hogares. Las viejas redes y los neumáticos no han solucionado el problema. Además, las casas suelen hundirse.

Weah ha destacado que hará todo lo que este en sus manos para conseguir marcar la diferencia, pero también ha insistido en que independientemente del resultado final de las elecciones los problemas "siguen siendo muy grandes".