ROMA, 14 Jul. (Reuters/EP) -
El número de gente viviendo bajo el umbral de la pobreza en Italia ha alcanzado en 2015 la cifra más alta en 10 años, algo que podría suponer un duro golpe para la administración del actual presidente, Matteo Renzi, según los datos que ha hecho públicos el Instituto Nacional de Estadistica Italiano (ISTAT).
Según el informe, el número de personas que viven en "absoluta pobreza" ascendió a 4,6 millones en 2015, lo que supone un 7,6 por ciento de la población, que contrasta con el 6,8 por ciento de 2014. La cifra publicada este jueves es la más alta desde que comenzó a medirse este umbral en 2005.
Renzi llegó a la Presidencia en febrero de 2014 con la promesa de dinamizar una economía cada vez más estancada, pero su popularidad ha descendido de manera drástica y los sectores más críticos le han acusado de llevar al Partido Democrático del centro izquierda tradicional a la derecha y perder el contacto con la clase trabajadora y los pobres.
El ISTAT define la pobreza absoluta como la condición en la que se encuentran aquellos incapaces de consumir bienes y servicios "esenciales para evitar formas severas de exclusión social".
La región más afectada es el sur, la zona menos desarrollada del país, con un 10 por ciento de la gente viviendo en absoluta pobreza. Por otro lado, en el norte las cifras rondan el 6,7 por ciento.
En Italia, la situación está empeorando de igual manera para los desempleados y aquellos que tienen trabajo, con un 6,1 por ciento de las familias viviendo bajo el umbral de pobreza a pesar de tener a al menos un miembro con empleo. Las cifras ascienden a un 11,7 por ciento en los casos en los que el trabajo proviene de las fábricas.
El ISTAT también ha destacado que aquellos viviendo en "pobreza relativa", aquellos cuyos ingresos son menores a la media, también han aumentado, llegando a 8,3 millones de personas, lo que representa un 13,7 por ciento de la población. En 2014, esa cifra se situaba en un 12,9 por ciento, los niveles más altos de la historia desde que comenzaron las estadísticas.
En otoño, Renzi se enfrentará a un referéndum crucial que serviría para reducir los poderes del Senado y agilizar los procesos parlamentarios. El primer ministro italiano ha comunicado en diversas ocasiones su voluntad de dimitir si el referéndum no sale adelante.
