Critica a los países occidentales por haber impulsado el extremismo islamista contra la Unión Soviética
MOSCÚ, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha lamentado este viernes que los países considerados como "ganadores" de la Guerra Fría intenten "remodelar" el mundo a su antojo para adaptarlo a sus propias necesidades, según ha informado la agencia de noticias RIA Novosti.
"Parece que los denominados ganadores de la Guerra Fría están determinados a tenerlo todo y remodelar el mundo para convertirlo en un lugar que pueda servir solo a sus intereses", ha afirmado Putin, durante su intervención en el Foro de Discusión de Valdai, que se celebra en la ciudad de Sochi.
"El actual sistema de relaciones internacionales, leyes internacionales y los sistemas de control y equilibrio se han demostrado, por tanto, inútiles, obsoletos y aptos para ser derribados", ha asegurado Putin.
El mandatario ruso ha criticado a los países occidentales por considerar que fueron los que alentaron el extremismo islamista contra la Unión Soviética en Afganistán, el mismo movimiento del que luego derivaron los talibán y Al Qaeda.
"Me sorprendo constantemente porque nuestros socios occidentales cometen el mismo error una y otra vez. En su día, patrocinaron a los extremistas islamistas que lucharon contra la Unión Soviética en Afganistán. De esos movimientos luego nacieron Al Qaeda y los talibán", ha explicado.
El presidente ruso también ha afirmado que Rusia no ha sido la causante del conflicto en la vecina Ucrania y ha negado que su país esté intentando construir un imperio o rebajar la soberanía de los países de su entorno.
Putin ha recordado que la Guerra Fría hace décadas que terminó pero nunca se llegó a firmar la paz. "La Guerra Fría terminó pero no terminó con la paz ni con un acuerdo claro y transparente sobre las nuevas reglas", ha afirmado.
El mandatario ruso ha asegurado, además, que el concepto de soberanía nacional es considerado por muchos países como algo relativo porque hoy en día, en el orden mundial, lo único que importa es la lealtad a una única potencia mundial, en clara referencia a Estados Unidos.
"En un mundo dominado por un único país y su grupo de satélites, el proceso de toma de decisiones globales se reduce a impulsar sus propias recetas como si fueran propuestas universales. Este grupo se ha convertido en tan ambicioso que sus soluciones se presentan como si fueran las toda la comunidad internacional", ha concluido.
