MADRID, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de República Democrática del Congo (RDC) ha argumentado este viernes que no participará en la conferencia de donantes de Ginebra sobre la situación humanitaria en el país, que se celebrará el 13 de abril, debido a que las agencias humanitarias "no respetan" sus responsabilidades en el país.
En su comunicado, el ministro de Solidaridad y Asuntos Humanitarios, Bernard Biando Sango, ha indicado que "no existe una misión conjunta entre el Gobierno y los actores humanitarios para la evaluación y validación de los anuncios hechos al público".
En este sentido, ha señalado que el Gobierno ha informado de la existencia de 231.346 desplazados internos en el país, mientras que estos organismos "hablan de más de cuatro millones de desplazados".
Asimismo, ha dicho que "no existe un plan armonizado de utilización de los fondos recabados en esta conferencia (de Ginebra)", al tiempo que ha anunciado el lanzamiento de un programa de respuesta humanitaria dotado de cien millones de dólares (cerca de 81 millones de euros).
"Respecto a la conferencia de Ginebra del 13 de abril (...), el Gobierno no ha recibido las respuestas apropiadas a las preocupaciones legítimas presentadas tras la reunión del Grupo Técnico de Trabajo el 27 de marzo y considera, lamentablemente, que la respuesta de nuestros socios humanitarios es ambigua y evasiva", ha remachado.
El subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Mark Lowcock, dio el 19 de marzo la voz de alarma ante el deterioro de la situación humanitaria en RDC, donde las necesidades se han duplicado en el último año debido al aumento de la violencia, y apeló a la comunidad internacional a aportar los fondos necesarios para hacerle frente.
"Las necesidades humanitarias, provocadas por el conflicto interno, se han duplicado en el último año", explicó ante el Consejo de Seguridad de la ONU, antes de subrayar que actualmente trece millones de personas en el país necesitan asistencia humanitaria.
Así, añadió que hay 4,5 millones de desplazados internos y otros casi 746.000 refugiados en los países vecinos y más de 4,6 millones de niños con desnutrición aguda, incluidos 2,2 millones con desnutrición aguda severa.
A esto se suma el que el país ha experimentado en el último año "el peor brote de cólera en 15 años" y que también registra "una epidemia de violencia sexual, de buena parte de la cual no se informa ni se combate, y que en buena medida sufren los niños", según Lowcock.
EL GOBIERNO RECHAZA FINANCIACIÓN PARA LAS ELECCIONES
El anuncio de Biando Sango ha llegado cuatro días después de que el Gobierno de RDC rechazara cualquier ayuda internacional para financiar las elecciones presidenciales previstas para finales de año.
La decisión fue tomada después de que Estados Unidos y varios países europeos mostrasen su preocupación sobre los planes de la comisión electoral para utilizar 100.000 máquinas electrónicas de voto nuevas, sistema que no ha sido probado y podría derivar en fraude.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, advirtió en febrero a las autoridades de RDC de que, si no utilizaban papeletas impresas en las elecciones, perderían el apoyo estadounidense.
El portavoz del Gobierno congoleño, Lambert Mende, instó a los países donantes a que dirijan sus aportaciones a otros sectores como la sanidad o la educación. "Ningún país del mundo aceptaría la interferencia extranjera en un ejercicio de soberanía", señaló.
Las elecciones presidenciales, que se celebrarán el 23 de diciembre, han sido atrasadas en numerosas ocasiones desde que el presidente Joseph Kabila se negara a dejar el Gobierno.
El mandato de Kabila expiró a finales de 2016 y su prórroga ha generado disturbios en el país africano. Bruno Tshibala, antiguo líder del principal partido de la oposición, fue designado por el presidente hace un año para conformar un Gobierno de unidad con el que sortear la escalada de tensiones.
