ABU GREIN (LIBIA), 29 Ago. (Reuters/EP) -
Las fuerzas leales a Muamar Gadafi están utilizando el "terror" para forzar a los residentes de Sirte a sumarse a los combates para defender la ciudad, rodeada por las milicias rebeldes sublevadas contra Gadafi, según han asegurado los propios insurgentes.
Un portavoz del Consejo Nacional de Transición, Shamsidin Abdulmolá, ha asegurado que la mayoría de la población de Sirte está en contra de Gadafi, "pero la minoría leal a Gadafi tiene las armas". "Están usando todo tipo de tácticas de terror", ha afirmado. Abdulmolá ha apuntado que han tenido noticias de que unos 45 soldados de Gadafi han sido ejecutados en Sirte por negarse a luchar por lo que consideran una causa perdida.
Otro portavoz rebelde ha explicado que los gadafistas están diciendo a la gente a través de mensajes transmitidos por los teléfonos vía satélite que los rebeldes les van a matar. "Pero hemos enviado un mensaje claro: nuestras tropas no van a matar a nadie", ha asegurado.
Los gadafistas estarían difundiendo que los rebeldes son bárbaros sedientos de sangre, por lo que la única alternativa de la población sería tomar las armas para defender Sirte, lo que complica las iniciativas para lograr una rendición de la localidad natal de Gadafi.
"No puedo decir que haya ningún avance porque hemos tenido dificultades con la gente del régimen procedente de Trípoli", ha señalado Hasan Droy, representante para Sirte del Consejo Nacional de Transición, máximo órgano de los rebeldes. "Intentan convencer a la gente de que la batalla ya no es por Gadafi, sino para defenderse ellos mismos", ha asegurado.
En estos momentos las fuerzas sublevadas intentan avanzar por carretera hacia Sirte --situada a 450 kilómetros al este de Trípoli-- tanto desde el este como desde el oeste. La columna del oeste avanza lentamente y ha tomado este lunes un pequeño destacamento en Abu Grein, a unos 130 kilómetros de la ciudad.
"Estamos limpiando esta zona. Los hombres de Gadafi están por todas partes aún", ha explicado un miliciano, Hasan Shaba. En muchos edificios de la localidad ondean aún la bandera verde gadafista y los pocos vecinos que se aventuran a salir relatan que la situación es confusa.
"Estamos esperando a ser liberados adecuadamente. Nadie sabe lo que ocurre aquí. Nadie quiere a los gadafistas aquí. Estamos rogando a los rebeldes que se queden", ha declarado un vecino, Ismail Abdulá.
Mientras, en el este, los rebeldes han llegado al pueblo de Nawfaliyah, a unos 100 kilómetros de Sirte, y aseguran que la resistencia a su avance hasta ahora ha sido escasa.
"Ha habido algunos combates pequeños. (Los gadafistas) no tienen munición. Su moral está baja", ha asegurado un miliciano, Senusi Mabruk. "Si Alá quiere, la gente de Sirte liberará la ciudad. Esperaremos dos, tres o cuatro días. No hay problema. Tenemos a la OTAN sobre nosotros", ha argumentado.
Sirte es la única ciudad importante aún bajo control de los gadafistas y es además la ciudad natal del líder libio. De hecho, la mayoría de los 100.000 habitantes de la ciudad pertenecen a la tribu gadafa, que dio nombre a Gadafi.
