MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los rebeldes comunistas filipinos están convencidos de que superarán la declaración de guerra que les ha hecho el presidente del país, Rodrigo Duterte, que esta semana puso fin a las conversaciones de paz, y han considerado que incluso saldrán más reforzados.
El ministro de Defensa de Filipinas, Delfin Lorenzana, declaró el martes una "guerra total" contra la guerrilla maoísta, resaltando que el fin de las negociaciones es "formal". En este sentido, dijo que el Ejército combatirá contra el Nuevo Ejército del Pueblo (NEP), brazo armado del Partido Comunista de Filipinas (CPP), sin atacar a sus seguidores pacíficos.
El jefe del equipo negociador de paz del Frente Nacional Democrático de Filipinas (FNDF, coalición que incluye a los comunistas), Fidel Agcaoili, ha asegurado que la lucha continuará.
"Primero fue (Ferdinand) Marcos, luego Cory Aquino, Joseph Estrada y muchos secretarios (del Departamento Nacional de Defensa) y jefes de (las Fuerzas Armadas de Filipinas) desde entonces. Como antes, campearemos la declaración de Lorenzana y ganaremos fuerza", ha sostenido, en referencia a varios expresidentes, según informa el diario 'Inquirer'.
"El movimiento revolucionario persistirá y continuará la lucha para la liberación nacional y social de los filipinos hasta que se alcance una paz justa y duradera en el país", ha asegurado Agcaoili, quien ha dicho haber recibido una notificación formal del Gobierno de que las conversaciones de paz quedan suspendidas.
