MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Rusia ha afirmado este martes que cumplirá el fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) para pagar indemnizaciones por la matanza de Beslán --un ataque terrorista que acabó con un asalto y que se saldó con más de 330 muertos en septiembre de 2004--.
El Ministerio de Justicia ruso ha afirmado que "se considera que la decisión del tribunal ha entrado en vigor", agregando que "los participantes en el proceso no han adoptado más acciones", según ha informado la agencia rusa de noticias Interfax.
Horas antes, el TEDH ratificó su veredicto de abril sobre el suceso, obligando a Rusia a pagar cerca de tres millones de euros en indemnizaciones por no haber hecho lo suficiente para impedir la matanza y por la excesiva fuerza letal empleada por los agentes para acabar con el secuestro del centro educativo.
En su sentencia, el tribunal establece que el Gobierno ruso falló al no adoptar medidas de prevención para impedir ese ataque, toda vez que las autoridades tenían "suficiente información específica" que indicaba que se planeaba un ataque terrorista contra una institución educativa.
"No se había hecho lo suficiente para impedir que los terroristas se reunieran y se prepararan; se dieron insuficientes pasos para impedir que se desplazaran el día del ataque; la seguridad en la escuela no se había reforzado y ni la escuela ni el público habían sido alertados sobre la amenaza", explicó el TEDH en su fallo de abril.
Por unanimidad, los miembros del tribunal concluyeron que Rusia incumplió las obligaciones del artículo 2 de la Convención Europea de Derechos Humanos porque la investigación sobre el atentado "no ha podido llevar a determinar si la fuerza empleada por los agentes estatales estuvo o no justificada en esas circunstancias".
Además, el tribunal también concluyó que hubo "graves fallos" del Gobierno ruso a la hora de "planear y controlar" la operación de las fuerzas de seguridad que puso fin al ataque terrorista.
El TEDH ha adoptado esta sentencia por la denuncia presentada contra el Gobierno ruso por 409 ciudadanos rusos que sufrieron directamente el secuestro o que perdieron a familiares en la matanza.
En septiembre de 2004, un comando de terroristas fuertemente armados secuestraron en una escuela de Beslán, en Osetia del Norte (Rusia), a un millar de personas, en su mayoría niños. El asalto terminó con una intervención de las fuerzas de seguridad rusa que se saldó con más de 330 muertos y más de 750 heridos.
