JERUSALÉN, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El "disparo de advertencia" contra Siria efectuado esta mañana por el Ejército israelí ha sido, en realidad, un misil lanzado por el Cuerpo de Artillería contra un puesto de control militar sirio, según informa el diario hebreo 'Yedioth Aharonoth'.
El Ejército respondió de esta manera al impacto de un proyectil sirio de 120 milímetros en el este de los Altos del Golán en lo que se trataría de la primera acción armada israelí contra Siria desde la guerra de 1973.
El proyectil, según fuentes del Ejército israelí, no estaba específicamente destinado contra Israel, sino que se desvió de su trayectoria original en el transcurso de los combates entre las fuerzas sirias y los rebeldes en la frontera.
En su comunicado inicial, el Ejército se había limitado a describir esta acción como meros "disparos de advertencia", sin precisar la verdadera naturaleza de su reacción.
Sin embargo, Israel ya había advertido de que respondería con dureza ante cualquier amenaza procedente de la guerra civil siria. Como ya hiciera la semana pasada tras la incursión de tres tanques sirios en su territorio, el Ejército israelí ha presentado hoy una queja a las fuerzas de Naciones Unidas que operan en la zona, que Israel ocupa desde 1967. En la queja, el Ejército indica que "no tolerará disparos procedentes de Siria", a los que "responderá con severidad".
Este incidente, además, tiene lugar solo horas después de que el ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, advirtiera de que su país responderá en consecuencia si algún proyectil sirio explotara en los Altos del Golán.
"El mensaje ha sido enviado. ¿Puedo asegurar con confianza que no va caer ningún cohete? No puedo. Si cae, responderemos", declaró Barak a la radio del Ejército israelí, tras advertir al presidente sirio, Bashar al Assad, de que contenga sus ataques contra los rebeldes apostados en el Golán, un territorio relativamente tranquilo durante las últimas décadas.
El pasado jueves, un proyectil de mortero procedente del conflicto sirio impactó en un asentamiento israelí en la región, pero no hizo explosión.
Israel se ha mantenido al margen del conflicto, a la espera de que se dilucide algún resultado del enfrentamiento, pero incidentes como los de las últimas semanas están forzando al Gabinete israelí a adoptar una postura cada vez más beligerante. "El problema de Siria podría convertirse en nuestro problema", declaró hace una semana el jefe del Estado Mayor, el general Benny Gantz.
