NUEVA DELHI, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Al menos tres manifestantes han muerto --incluida una adolescente de 16 años-- por disparos del Ejército indio en el disitrito de Kulgam, en la parte de Cachemira bajo control de India, según informan medios indios.
Entre los fallecidos están Shakir Ahmad, de 22 años, Irshad Majid, de 20 y la adolescente de 16 identificada como Andleeb, todos ellos vecinos de Hawoora, en Kulgam. Otros diez manifestantes resultaron heridos, dos de ellos por heridas de bala.
El Ejército ha explicado que los soldados respondieron tras ser atacados con piedras durante una manifestación. Una patrulla fue atacada por unas 500 personas, sostiene el Ejército en un comunicado recogido por la cadena de televisión india NDTV.
Los militares avisaron a los manifestantes, que también lanzaron cócteles molotov contra la patrulla, hasta que se percataron de que "terroristas infiltrados" les estaban disparando e hirieron a algunos soldados.
"En respuesta a esta grave provocación y con el fin de garantizar la seguridad de las tropas, recurrieron a fuego controlado que derivó desafortunadamente en la pérdida de vidas humanas. El incidente está siendo investigado", señala el Ejército.
Las autoridades han suspendido los servicios de comunicación en Kulgam, Anantnag, Shopian y Pulwama para evitar nuevas protestas y el gobernador de Jammu y Cachemira, NN Vohra, ha convocado una reunión de alto nivel con policías y militares para abordar este caso.
Estas muertes se producen después de la huelga del viernes convocada por los separatistas para protestar por la detención de Asiya Andrabi, líder del grupo separatista femenino Dukhtaran e Millat (DeM), y dos miembros más de la organización por parte de los servicios secretos indios.
Pakistán e India se disputan la región de la Cachemira histórica desde 1947 y se han enfrentado por ella en dos de las tres guerras que han mantenido desde su independencia de Reino Unido. En 1999 hubo un breve pero intenso enfrentamiento militar entre ambas potencias nucleares y desde 2003 se mantiene una frágil tregua.
