BEIRUT, 25 Abr. (Reuters/EP) -
El enclave de Qalamun Oriental, situado al noreste de Damasco, está ya bajo control del Gobierno sirio después de que lo hayan abandonado los últimos rebeldes, según ha informado este miércoles la unidad de medios de Hezbolá, el partido-milicia chií libanés que apoya al régimen de Bashar al Assad.
En virtud del acuerdo alcanzado entre el Gobierno sirio y los rebeldes el viernes pasado, unos 3.700 rebeldes y familiares han abandonado Qalamun Oriental, a unos 40 kilómetros al noreste de Damasco, en los últimos días.
Los últimos 38 autobuses han partido este miércoles al amanecer, según la citada fuente. Todos ellos se dirigen hacia las zonas bajo control rebelde de Idlib y Jarablús, en el norte de Siria, según ha informado la televisión estatal siria.
Ahora, solo queda un reducto de territorio rebelde cerca de la capital, una zona al sur de la ciudad donde Estado Islámico controla una zona junto al territorio controlado por las facciones rebeldes.
Las fuerzas progubernamentales están bombardeando el enclave, que incluye el campo de refugiados palestinos de Yarmuk, el distrito de Hajar al Aswad y las zonas aledañas.
En una señal del control del Estado de la zona de Qalamun, las fuerzas de seguridad sirias han comenzado a desplegarse en varias localidades este miércoles. La televisión estatal ha mostrado imágenes de convoyes de vehículos policiales y motos entrando en la localidad de Ruhaiba recibidos con júbilo por decenas de civiles en las calles.
El presidente sirio, Bashar al Assad, apoyado por Rusia e Irán, está tratando de suprimir los últimos enclaves rebeldes en torno a Damasco. A principios de abril consiguió hacerse con el control del enclave de Ghuta Oriental tras años de asedio.
