QUITO, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
La última campaña contra el feminicidio en Ecuador ha despertado la polémica en una sociedad dividida a favor y en contra del mensaje de cuatro vallas distribuidas por la capital del país, 'Quito', en la que se puede leer: "Si puta es ser libre y dueña de mi cuerpo soy puta ¿y qué? No más cruces rosadas".
La concejala Carla Cevallos, que ha impulsado la campaña, ha defendido su iniciativa asegurando que el mensaje cuestiona precisamente la visión machista del problema, que permite el maltrato a la mujer incluso desde los insultos cotidianos.
"Utilizamos esa frase porque nuestra realidad es así, a la mujer la catalogan como puta por actuar con libertad, por vestirse como desea vestirse, por hablar como quiere hablar", ha explicado la concejala, según recoge el diario ecuatoriano 'El Comercio'.
Cevallos ha argumentado que busca concienciar sobre el impacto de la violencia de género y del feminicidio en el país y no incitar a la mujer a la prostitución como forma de libertad. Aun así, las vallas han despertado la polémica en las redes sociales con comentarios tanto a favor como en contra.
"No entiendo por qué se asustan por usar la palabra puta y no por las muertes que se generan todas las semanas por la violencia de género, por las múltiples mujeres que están sufriendo violencia psicológica, física y sexual", ha lamentado la concejala en declaraciones a 'El Comercio'.
POR LA LIBERTAD DE LA MUJER
"Somos una sociedad hipócrita porque se asusta por la palabra puta y no por la realidad que vivimos". "Jamás me callaré, estoy luchando para que no existan más muertes, para que la violencia de género no sea pan de cada día de las mujeres", ha añadido.
La campaña que además de en cuatro vallas gigantes también se puede leer en algunos emplazamientos publicitarios de los transportes públicos de Quito, se mantendrán al menos un mes pese a la polémica.
Además, la concejala ha querido dejar claro que para esta iniciativa no se ha utilizado financiación municipal y sino que se ha desarrollado gracias a donaciones de ciudadanos a favor de la lucha contra la violencia de género.
Cevallos ha explicado que el alcalde Mauricio Rodas conoce los detalles de su propuesta y que, como político respetuoso con las libertades, según la edil, no le ha hecho ningún comentario al respecto. La joven asegura que las reacciones negativas vienen de los sectores más conservadores de Quito y por eso va a seguir a delante. "No más mujeres maltratadas, no más silencio". Por eso ha anunciado que habrá más acciones, como un concurso de fotografía y la colocación de cruces rosas por la ciudad.
CIFRAS ALARMANTES
Según el Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana, 100 mujeres fueron asesinadas en Quito entre el año 2012 y septiembre de 2014, el 44 por ciento de las muertes fueron catalogadas como feminicidio. Además, el 50,9 por ciento de víctimas tenía entre 21 y 35 años.
Hasta 1995 no existió en Ecuador una Ley contra la violencia a la mujer y la familia y en 2007 se promulgó un decreto por el cual se declaró como política de Estado la erradicación de la violencia de género hacia la infancia, adolescencia y mujeres. Desde el 2008 está en la Constitución el derecho a una vida sin violencia. Pese a eso, en Ecuador seis de cada 10 mujeres ha vivido algún tipo de violencia de género.
