El presidente canario pide "solidaridad" a las comunidades para redefinir el nuevo modelo de financiación

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Actualizado: jueves, 22 mayo 2008 19:18

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 22 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, pidió hoy a las comunidades autónomas "solidaridad" para redefinir el nuevo modelo de financiación regional y aseguró que el Ejecutivo de las islas apuesta por que se contemple la variable de la población en la redistribución de las partidas estatales.

En concreto, Rivero dijo en un foro del periódico 'Cinco Días' celebrado en la capital grancanaria que "la cohesión del Estado pasa por una revisión justa y solidaria del sistema de financiación".

Al respecto, Rivero dijo que a la vista del crecimiento demográfico experimentado por las islas, "se ha consolidado una deuda de 500 millones de euros" del Gobierno central con Canarias. "Una deuda que esta misma semana volvimos a plantear en el Consejo de Política Fiscal y Financiera a la espera de que el Gobierno estatal busque una posición común de las comunidades gobernadas por el PSOE, dados los recelos existentes respecto a la Generalitat de Cataluña, que pretende aplicar ya el capítulo financiero de su reformado Estatuto", indicó.

Además, el presidente canario expresó su temor por que el "debate derive hacia la polémica sobre negociaciones multilaterales frente a bilaterales, o hacia nuevos criterios que pondrían en peligro un principio constitucional como el de solidaridad interterritorial".

Así, Rivero dijo que los recursos financieros que demanda son "esenciales" para potenciar la inversión pública en Canarias. "Y no hablo de cualquier cosa. Me refiero a una de las palancas fundamentales para atenuar los efectos de que la crisis tiene sobre la inversión privada".

"ANTE LA CRISIS SOBRA EL CATASTROFISMO"

En otro momento de su intervención, Rivero se refirió a la crisis económica internacional y señaló al respecto que "situaciones" como ésta "requieren trabajo, confianza, decisión y unidad de acción". "En estos momentos no sobra nadie y lo que sí sobra es el catastrofismo y las batallas dialécticas", sentenció.

"No es hora de buscar culpables de una crisis económica global del mundo desarrollado, sino de compartir análisis y estrategias no tanto para resolverla como para sobrellevarla lo mejor posible, dado que nuestro margen de actuación como comunidad autónoma es bastante limitado", insistió.