LOGROÑO, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, ha afirmado este jueves en Logroño que "los primeros signos" del nuevo Gobierno de Grecia, recién formado por el primer ministro Alexis Tsipras, "no son esperanzadores", aunque ha reconocido que "se formó ayer, así que aún es difícil hacer pronósticos".
En su intervención en el desayuno-coloquio 'La nueva diplomacia económica', organizado por Diario 'La Rioja', Margallo ha sido cuestionado, además de sobre el nuevo Ejecutivo griego, sobre una eventual salida del país de la Unión Europea, a lo que ha contestado que "llevaría a un escenario dantesco para el pueblo griego y para el resto de la UE".
El ministro ha apuntado que la situación a la que se enfrenta el Gobierno de Tsipras es "muy complicada" y ha señalado que "cualquier subida del gasto público que hagan supone alejarse de los compromisos económicos adquiridos" con la Unión.
A juicio de Margallo, "el dinero que necesita Grecia", que ha cifrado en 7,4 millardos en un mes, lleva al país "a una situación muy crítica", pero ha afirmado que "se va a dar" por parte de la Unión Europea "si se respeta la condicionalidad de la deuda".
En este sentido, ha detallado que "el riesgo del nuevo Gobierno de Syriza viene no tanto porque las instituciones europeas accedan a modificar los plazos o el tipo de interés", algo que, como ha dicho "ya se ha hecho antes", sino porque "se respete esa condicionalidad, es decir, aceptar el marco que puso la troika, porque solo así hay garantías de que los acreedores cobren su deuda".
"Lo que no es imaginable en la Unión Europea es que se diga que no se paga la deuda anterior y que tampoco se piensan pagar las cuotas del futuro", ha recalcado Margallo, quien ha aprovechado para advertir que "vamos en Europa hacia una mayor integración, con más unión monetaria y económica, algo que todas las previsiones apuntan a que se va a acelerar a partir de ahora, con un Banco Central que actué como tal".
En sus palabras, esta unión "supone una gigantesca cesión de soberanía", por lo que "cuando Syriza dice que va a recuperar la soberanía de Grecia, me parece que no va con los tiempos". En general, para el ministro, "nacionalismo y Unión Europea no casan, es como intentar soplar y sorber al mismo tiempo".
