LOGROÑO/MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
El paro estructural ha aumentado en todas las comunidades pero no lo ha hecho en igual medida entre unas y otras. Las regiones en las que la tasa de paro es más alta son también las que registran la tasa de paro estructural mayor. Se trata de Andalucía, Murcia y Castilla La Mancha.
Mientras País Vasco, Asturias, La Rioja y Cantabria son las comunidades que tienen una tasa de paro más moderada y en las que la tasa de paro estructural también ha sido menor.
Son datos de Asempleo que ha indicado que tasa de paro estructural del mercado laboral español se sitúa actualmente en el 18%, seis puntos por encima de la que se registró en 2007.
Según el informe, Asturias, La Rioja, Madrid y Extremadura, son las comunidades autónomas con mayores posibilidades para seguir reduciendo el número de desempleados.
De hecho, según las estimaciones realizadas por Asempleo, la EPA (Encuesta de Población Activa) del cuarto trimestre del pasado año cerró con una tasa de paro del 18,5%, un porcentaje muy similar a la tasa de paro estructural. Unos datos que alertan del poco margen del que se dispone en España para reducir el número de desempleados, precisa Asempleo.
La crisis ha sido el motivo principal que ha repercutido en esta tasa y que podría seguir creciendo en los próximos meses, según Asempleo. A partir de las previsiones macroeconómicas prevé un aumento de los salarios y de los precios, factores que podrían seguir expulsando a trabajadores del mercado laboral e incrementando el número de parados de larga duración.
En este sentido, los parados de larga duración y, sobre todo, los jóvenes, son los colectivos más afectados por la actual situación. Estos últimos son los más vulnerables. El perfil de los parados que llevan menos de un año sin trabajar es, en su gran mayoría, el de una persona joven. Es por ello que, si la rigidez del mercado continúa, los jóvenes en esa situación pasarán a formar parte de los desempleados de larga duración, advierte Asempleo.
Con el fin de poner en marcha medidas para reducir la tasa de paro estructural, Asempleo señala la necesidad de una mayor inversión en formación que mitigue los efectos del cambio en las demandas de las empresas.
Asimismo, aboga por medidas que fomenten la competitividad y la flexibilidad, así como por una reforma de las políticas activas de empleo. Aspectos que señala como imprescindibles para reforzar la empleabilidad y evitar así el enquistamiento de la situación.
