Actualizado 26/07/2012 07:56

Desestiman las demandas ciudadanas para impugnar las presidenciales en México


MÉXICO DF, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) de México ha desestimado este miércoles todas las demandas presentadas por ciudadanos para impugnar las elecciones presidenciales que se celebraron el pasado 1 de julio en el país iberoamericano.

Los magistrados del TEPJF han decidido por unanimidad desestimar los seis juicios de inconformidad, cuatro de ellos presentados por militantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para impugnar los resultados de los 300 distritos electorales y dos por representantes de Sol Azteca --una organización social-- para impugnar el escrutinio en un distrito de Baja California Sur y en otro de México.

Los juristas han alegado que la iniciativa popular tiene vetado el acceso al sistema de administración de justicia cuando se trata de denuncias electorales, ya que éstas corresponden a los observadores --nacionales e internacionales-- y a los partidos políticos y candidatos que concurren a los comicios.

No obstante, han apuntado que, pese a que no serán tramitadas, las denuncias ciudadanas se tendrán en cuenta a la hora de resolver los juicios de inconformidad presentados por el Movimiento Progresista, del que forma parte el PRD, para impugnar las elecciones presidenciales, según informa el diario 'Milenio'.

El Movimiento Progresista ha acusado al Partido Revolucionario Institucional (PRI) de comprar cinco millones de votos regalando a los electores tarjetas telefónicas, bonos de supermercado y materiales de construcción a cambio de su apoyo en las urnas, apuntando que incluso hubo reuniones entre los gobernadores del PRI para determinar cuántos votos debía comprar cada uno.

Además, ha aseverado que el PRI utilizó "recursos ilícitos", probablemente "recursos públicos o del crimen organizado", para financiar la campaña de su candidato presidencial, Enrique Peña Nieto.

También apuntó que, al margen de la procedencia de los recursos, el PRI gastó 4.200 millones de pesos (260 millones de euros) en la campaña electoral de Peña Nieto, cuando el límite legal son 336 millones de pesos (20,8 millones de euros).

INTERCAMBIO DE ACUSACIONES

Por su parte, el PRI ha acusado al Movimiento Progresista de financiar la campaña electoral de su candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, con dinero público, lo que constituye una violación de la Ley Electoral.

Además, ha aseverado que el Movimiento Progresista superó el límite establecido por la legislación para el gasto electoral y que lo ocultó derivando parte del gasto a través de organizaciones sociales como Austeridad Republicana y Honestidad Valiente, entre otras.

En tercer lugar, ha acusado a la coalición de izquierda de impedir que las autoridades electorales del país iberoamericano controlaran el origen y el destino de los fondos de la campaña electoral, unos 1.200 millones de pesos (72,8 millones de euros).