MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los grupos municipales de Ahora Madrid, PSOE y Ciudadanos han votado este viernes durante el Pleno municipal a favor de que los policías municipales y el personal de oficios- auxiliar de Policía mayores de 45 años- puedan realizar turnos laborales de noche.
La edil de Ciudadanos Ana María Rodríguez, quien ha propuesto la iniciativa, ha recordado que " el organismo humano es especialmente sensible y que es necesario limitar la duración de los trabajos nocturnos".
"No se debe confundir juventud con eficacia policial, ya que lo importante es la profesionalización", ha expresado Rodríguez, quien a continuación ha señalado que "se eligen a los más capacitados".
Para la edil de la formación naranja, la "fórmula ideal" sería establecer grupos en los que hubieran "jóvenes y experimentados".
Por su parte, el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero, ha indicado que la Organización Internacional del Trabajo (OIT), asegura que los turnos de noche conllevan "alteraciones del equilibrio biológico, un cambio en hábitos alimenticios, y una alteración del sueño importante".
"Vamos a apoyar el planteamiento porque sí se ha puesto un comentario, el de tener en cuenta asegurar el funcionamiento operativo de la noche", ha explicado Barbero.
El socialista Ramón Silva ha indicado que "hay que volver a negociar el acuerdo" con los sindicatos policiales, pero que dirían "sí" a la propuesta "porque es verdad que todos los sindicatos la apoyan".
Contraria a estos planteamientos se ha mostrado Inmaculada Sanz (PP), quien ha indicado que no se fían de Ahora Madrid en el ámbito de la seguridad.
"Es probado su sectarismo a la hora de purgar a todo el que no cumple con sus principios y de premiar a sus amiguetes", ha criticado la popular, quien ha añadido que la política de recursos humanos de Ahora Madrid se define por "el sectarismo ideológico y las purgas".
Según Sanz, las consecuencias de todo ello es un "peor servicio" a los ciudadanos, con menos patrullas, así como "consecuencias políticas, administrativas y quién sabe si penales".
En su turno de réplica, Javier Barbero ha indicado que el hecho de que el PP hable de querellas "es de risa".
