Blanco, Aguirre y Gallardón asisten al calado del túnel de la línea de Cercanías que conectará Chamartín con la T4

Actualizado: viernes, 6 noviembre 2009 6:59

MADRID, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Fomento, José Blanco; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y la delegada del Gobierno en Madrid, Amparo Valcarce, asistirán hoy, a las 12.15 horas, al calado del túnel de la futura línea de Cercanías entre Chamartín y la Terminal T4 del aeropuerto de Barajas, que está construyendo el Ministerio de Fomento.

La línea, de cerca de 9 kilómetros, está incluida en el Plan de Cercanías para Madrid, presentado el pasado mes de mayo por Blanco y Aguirre. En concreto, el nuevo trazado tiene sus extremos en dos estaciones ya construidas, Chamartín y Barajas (T-4) --la estación de Barajas fue ejecutada en las obras correspondientes a la T-4 del Aeropuerto-- con dos paradas intermedias, la de Manoteras y Valdebebas.

La nueva línea construida, que estará lista para el próximo año, posibilitará la reducción de tiempos de viaje al aeropuerto. Así, el recorrido entre las estaciones de AVE de Chamartín y Atocha y el Aeropuerto de Madrid Barajas (T4) se podrá realizar en 10 y 24 minutos respectivamente. Además, desde el centro de Madrid (Puerta del Sol) se podría acceder a la Terminal T-4 en 22 minutos.

Con una inversión de 161,7 millones de euros para la construcción de la línea, las obras del acceso ferroviario al aeropuerto de Barajas se dividen en dos tramos, uno de ellos soterrado. El primero consiste en la cuadruplicación de la doble vía de contorno de Hortaleza con una longitud aproximada de 4,1 kilómetros, que va desde la cabecera norte de la estación de Chamartín hasta el cruce con la M-40.

En este tramo, se construye además la estación de Manoteras, que permitirá el intercambio de viajeros con la línea ML1 de Metro Ligero entre Pinar de Chamartín y Las Tablas. Mientras, el segundo tramo consiste en una doble vía de nuevo trazado soterrado en su totalidad. La longitud de este tramo es de 4,7 kilómetros.

En este punto destaca la ejecución de la estación de Valdebebas, que prestará servicio al nuevo desarrollo urbanístico, a la ampliación de los recintos feriales Juan Carlos I (IFEMA), a la Ciudad Deportiva del Real Madrid y a la futura Ciudad de la Justicia. La línea finaliza en la estación de Barajas-T4.

El tramo soterrado está equipado con siete pozos de ventilación y salida de emergencia; dos rampas de acceso de vehículos ligeros y pesados, el acceso al túnel mediante ascensor para ambulancias en las estaciones subterráneas, la vía en placa sobre plano único para facilitar la evacuación, un cable de detección de incendios y telefonía móvil.

LA FASE FINAL DEL TÚNEL

Se denomina calado o "cale" a la fase final en la excavación de un túnel. Hoy se asistió a la excavación del último avance del túnel ejecutado desde el lado Chamartín. Se han unido de este modo los dos frentes de ataque que, durante los últimos meses, se venían excavando desde ambos sentidos: Chamartín y Valdebebas.

Este túnel se ha construido por el método belga, que consiste en ejecutar su sección por avances de unos dos metros y medio de longitud. La excavación del túnel se realiza por procedimientos manuales, en fases de sección reducida, de manera que según se va excavando se va realizando la entibación.

Así, en primer lugar se excava una pequeña sección, "la mina", situada en la clave del túnel. Una vez sostenida ésta, mediante entibación de madera, se empieza a abrir lateralmente su sección hasta tener completamente excavada y sostenida la bóveda en toda la longitud del avance, momento en el que se procede a su hormigonado.

Esta operación se suele completar cada 24 horas, de manera que la sección del túnel queda ya con el que será su revestimiento definitivo. Posteriormente, unos metros más atrás del frente se procede a la construcción de la totalidad de la sección del túnel, ejecutando sus hastiales o paredes laterales, y, finalmente, la contrabóveda, con la que se concluye la excavación.

Este método tradicional busca tener en cada momento pequeños frentes de excavación abiertos, aumentando así la seguridad de todo el proceso constructivo.