Foto: EUROPA PRESS
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MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
Sindicatos y colectivos integrados en la Mesa de Agentes Sociales por la Educación Infantil han alertado este martes de que un 10 por ciento de las plazas disponibles en la red pública de escuelas infantiles, aproximadamente 4.500 plazas, están sin cubrir por las "abusivas tasas impuestas por el Gobierno de la Comunidad de Madrid".
La representante de la Junta de Portavoces de Educación Infantil Pública 0-6, Carmen Ferrero, ha señalado que la mayoría de las plazas vacantes se concentra en el grupo dirigido a niños menores de un año por el suplemento de 60 euros mensuales que deben pagar, además de la cuota establecida.
Mientras, la responsable de la federación de enseñanza de CC.OO. Madrid, Isabel Galvín, ha destacado que la demanda de escolarización de niños y niñas de 0 a 3 años se ha reducido en casi un 60 por ciento con respecto al curso 2010/11.
En este sentido, ha asegurado que los 20.000 niños que estaban en lista de espera para las escuelas infantiles públicas, en el curso 2010/11, actualmente "han desaparecido". "Están en sus casas con sus abuelos, con sus padres que están desempleados, con alguna vecina, y por tanto no están recibiendo la educación que necesitan", ha dicho Galvín.
Por su parte, la representante de la Asociación Madrileña de Escuelas Infantiles de Gestión Indirecta (AMEIGI), Blanca Azanza, ha criticado que la Consejería de Educación dedique 34 millones de euros "procedentes de los impuestos de los madrileños" a la ayuda denominada 'cheques guardería', que facilitan a los ciudadanos acceder a las guarderías "privadas". "Lo que no tiene ningún sentido es que mientras tenemos un montón de vacantes en la red pública se esté destinando dinero a la escuela privada", ha declarado.
"El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha querido, antes de irse, dar el último zarpazo a la educación y dejar una red pública de escuelas infantiles en manos de empresas muy cercanas a la ideología que defienden, donde los derechos de los niños son algo secundario, donde importa potenciar niños competitivos, no solidarios, donde las familias no tienen lugar y donde las condiciones de los trabajadores dan lo mismo", ha declarado Azanza.
Por otro lado, el representante de la FAPA Francisco Giner de los Ríos, Camilo Jené, ha apuntado que no pueden entender como "hay familias con algún miembro en paro que no pueden acceder a las guarderías mientras la consejera de Educación, Lucía Figar, utiliza el dinero público, a través de los 'cheques guarderías' para llevar a sus hijos a escuelas privadas".
Además, Carmen Ferrero ha señalado que "el discurso que está de moda en el Gobierno de la Comunidad es la ayuda a los emprendedores" que, si se trasladase a la educación infantil pública, debería proteger a las pequeñas cooperativas. Sin embargo, Ferrero ha asegurado que "están siendo sustituidas por grandes empresas de servicios que son, en definitiva, amigos de la consejera".
En esta línea, la representante de Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT Madrid (FETE-UGT Madrid), Blanca Jiménez, ha señalado que las recientes medidas de la consejería constituyen un "ataque frontal a la educación" y un "maltrato a la infancia".
