Desmantelado un grupo que estafaba a ancianos con el método de la 'estampita' y el 'tocomocho'

Baliza encontrada en Colmenar Viejo (Madrid)
GUARDIA CIVIL
Actualizado: miércoles, 21 marzo 2018 10:32

MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Guardia Civil con destino en el Área de Investigación del Puesto Principal de Colmenar Viejo, en el marco de la Operación 'Estampita 2.0', han detenido a cinco personas por su presunta implicación en nueve delitos de estafa a personas de avanzada edad en varios municipios de Madrid, Toledo y Granada.

Según ha informado la Benemérita, hasta la fecha se han esclarecido un total de 9 estafas relacionadas con el grupo desmantelado, ocurridas en Granada (capital y Motril), Toledo (Illescas y Torrico) y Madrid (Colmenar Viejo y Villa del Prado).

El grupo organizado lo formaban cinco personas con vínculos familiares: tres hombres y dos mujeres de origen español y con edades comprendidas entre los 23 y 47 años de edad. Todos ellos residían en Casarrubios del Monte (Toledo) y por estos hechos se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal y delitos de estafa.

Los investigadores han localizado un total de 32.285,31 euros en cuentas bancarias de los implicados, de los más de 60.000,00 euros estafados.

INVESTIGACIÓN

La investigación se inició el pasado mes de septiembre, cuando los presuntos autores de las estafas trataron de engañar a un anciano para que retirara de sus cuentas bancarias en Guadalix de la Sierra y Colmenar Viejo una suma "importante" de dinero. Esta operación, no obstante, fue frustrada gracias a que personal de la entidad bancaria alertó a los familiares.

Para descartar que pudiera tratarse de un caso aislado, los agentes del Aréa de investigación de Colmenar Viejo hicieron gestiones con otras Unidades, encontrando denuncias por hechos similares en la localidad madrileña de Villa del Prado y en el municipio toledano de Torrico, originándose así la Operación.

Gracias al análisis de estas denuncias, se pudo llegar hasta tres personas de origen español y vecinos de Casarrubios del Monte como principales sospechosos, centrándose la investigación sobre ellos. El avance de la investigación permitió conocer la composición del grupo, formado por seis personas que actuaban en grupos de tres eligiendo siempre personas de avanzada edad como víctimas.

MODUS OPERANDI: TIMO DE LA 'ESTAMPITA' Y DEL 'TOCOMOCHO'

Una de las técnicas que utilizaban para engañar a los ancianos era la conocida la técnica del 'tocomocho'. De acuerdo con la Guardia Civil, para llevarla a cabo se desplazaban 3 personas hasta las inmediaciones de residencias de tercera edad y una de ellas abordaba a una víctima ofreciéndole la compra de un billete de lotería supuestamente premiado con 30.000 euros. A continuación, se acercaba una segunda persona ejerciendo funciones de gancho y se interesaba por la compra del citado billete.

Tras unos minutos de conversación llegaban al acuerdo de la compra a medias del décimo y se desplazaban con la víctima en su vehículo hasta su vivienda o hasta algún cajero para conseguir el dinero. Una vez que lo tenían en su poder, y para deshacerse de la víctima, le pedían que bajase del vehículo a comprar algún producto alimenticio. Acto seguido los presuntos autores abandonaban el lugar

En otros casos utilizaron el timo de la 'estampita', seleccionando a personas de avanzada edad que estuvieran en calles poco transitadas y solitarias. Uno de los miembros de esta organización, simulando una deficiencia mental, le ofrecía a la víctima una mochila con billetes. Después, hacía acto de presencia una segunda persona que ejercía funciones de gancho y le ofertaba a la víctima cambiarle la mochila a medias.

A los pocos minutos, volvía a aparecer esta segunda persona con un sobre que contenía el dinero referente a su parte, instando a la víctima a que fueran los tres hasta una entidad bancaria a sacar el dinero o a su vivienda si lo tenía en metálico. Cuando la víctima les había entregado el dinero, la persona que hacía de deficiente reclamaba chocolates para que el anciano se bajara del vehículo, abandonando inmediatamente los supuestos estafadores el lugar.

Para tener controlada a la víctima y al objeto de cubrir su huída, el grupo organizado camuflaba balizas de seguimiento en bolsos y "colgantes de la suerte", que colocaban a sus víctimas sin que las mismas supieran lo que verdaderamente contenía.