Tensión en el barrio de Tetuán por casa 'okupa'
Foto: EUROPAPRESS
Actualizado: viernes, 19 septiembre 2014 13:14
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Según ha explicado hoy la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes

   MADRID, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -

   La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha explicado hoy que la Policía Nacional ha desalojado esta mañana el hogar social Ramiro de Ledesma, situado en la madrileña calle Juan de Olías, en cumplimiento de la orden judicial y ante la ausencia de recurso por parte de sus ocupantes ilegales, de ideología ultraderechista.

   En una rueda de prensa para presentar los datos de la Operación Verano de la Guardia Civil, Cifuentes ha reconocido que la presencia de esta casa okupada, donde durante casi un mes se ha repartido comida sólo a españoles y donde dormían varias personas sin recursos, ha generado una "tensión continuada entre grupos neonazis y antifascistas" y la presencia policial ha sido "más o menos continuada en el barrio para evitar que los incidentes no fueran a más y prevenir otros".

   Eso sí, la representante del Gobierno central en Madrid ha reiterado que han procedido al desalojo por la existencia de una orden judicial, "jamás por iniciativa propia", y porque, dos días después de notificárseles el mandato judicial del desalojo, no han presentado recurso y los propios moradores "han expresado a la Policía que no iban a recurrir".

   "El desalojo se ha producido sin ningún tipo de incidentes y se han ido de forma voluntaria. En ese momento había tres personas en el edificio, que lo han abandonado sin ningún tipo de problemas", ha detallado.

   La delegada del Gobierno confía ahora que "se rebaje considerablemente la tensión en el barrio". Espera que tras la "muy rigurosa" actuación policial los vecinos "se tranquilicen" y "desaparezca el foco de tensión". No obstante, ha anunciado que la Policía nacional seguirá vigilando la zona "hasta que se llegue a una situación de absoluta normalidad, que es lo que todos queremos".

   De hecho, ante la posibilidad de que los ultraderechistas u otros grupos se trasladen a otra casa, ha advertido que la Policía estará vigilante para evitar alteraciones del orden público, independientemente si alguien les cede una casa o la okupan ilegalmente. "La Policía actuará como lo ha hecho siempre para restablecer la situación de tranquilidad en el barrio", ha avisado.

LA OKUPACIÓN ESTÁ CAUSANDO "VERDADEROS PROBLEMAS"

    Cristina Cifuentes ha reconocido que las okupaciones en la Comunidad de Madrid están causando "verdaderos problemas" . "En Madrid hay un problema con la okupación de determinados espacios. Algunos vecinos piensan que traen problemas, otros que dicen que hacen una labor social. Pero es el juez el que tiene que tomar la decisión basado en unos hechos contrastados. Pero contrariamente a lo que pueda parecer y a lo que han dicho algunos medios, Madrid es una ciudad segura, cada vez más segura, según los datos", ha subrayado.

   "Podríamos hacer un monográfico del tema, pero son los jueces los que determinan esa orden de desalojo. En este caso el juez ha actuado con mayor rapidez. La Policía le entregó un informe en el que estimara que se estaban produciendo de manera reiteradas alteraciones del orden público y de situaciones que estaban perturbando de manera grave la convivencia en el barrio y por ello el juez actuó con más agilidad", ha proseguido.

   En ese sentido, Cifuentes ha destacado que cada vez que hay una 'okupación' se producen alteraciones del orden público. "Entonces, la Policía se dirige al juez para que trate de acelerar el desalojo, pero no siempre ocurre así. Afortunadamente en se caso el juez entiende los argumentos de la Policía", ha dicho.

   Concretamente en el caso del centro Ramiro de Ledesma, en el informe policial remitido al magistrado señalan que se encontraron armas blancas en la casa ultraderechistas y hubo determinados incidentes en las últimas semanas, "algunos atribuibles a este grupo y otros a grupos contrarios".

   Fueron diez incidentes importantes, la mitad protagonizados por el grupo neonazi y la otra por los antifascistas, según sus datos. "Sin duda alguna, el hecho de que hubiera a 600 metros otra casa 'okupada' por un grupo antifascista (La Enredadera) ha contribuido a generar este tipo de incidentes", ha concluido la delegada.

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