TOKIO, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fabricante japonés de automóviles Mitsubishi Motors cerró la primera mitad del ejercicio fiscal 2016-2017 (de abril a septiembre de 2016) con unas pérdidas netas de 219.600 millones de yenes (1.907 millones de euros al cambio actual), en comparación con las ganancias de 52.100 millones de yenes (452 millones de euros) del mismo período del año pasado.
Los resultados económicos de la empresa se vieron afectados de forma negativa por el impacto que ha tenido sobre su negocio la publicación de datos erróneos de los consumos de combustible de algunos de sus modelos y de otros que fabrica para Nissan.
La compañía anunció el pasado mes de junio que su balance anual recibiría un impacto de unos 50.000 millones de yenes (434 millones de euros), vinculados con el pago de compensaciones a los clientes afectados por los consumos equivocados.
Entre abril y septiembre de este ejercicio, la multinacional registró unos ingresos de 864.900 millones de yenes (7.514 millones de euros), lo que se traduce en una disminución del 19% respecto a las cifras del mismo período del año anterior.
Las pérdidas operativas de la compañía, que acaba de nombrar a Carlos Ghosn como presidente, se situaron en 31.600 millones de yenes (274,5 millones de euros) en la primera mitad del ejercicio 2016-2017, frente a los 'números negros' de 58.400 millones de yenes (507 millones de euros) del mismo período del año previo.
A raíz de estos resultados, la corporación ha aumentado su previsión de pérdidas netas para el conjunto del ejercicio, pasando de los 145.000 millones de yenes (1.259 millones de euros) que preveía perder en junio a los 239.600 millones de yenes (2.081 millones de euros) de 'números rojos' con los que estima finalizar el año.
