MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El fabricante checo Skoda ha incorporado innovaciones tecnológicas y de equipamiento a su Scout, que se ha lanzado con tres variantes de motor y tecnología de tracción total de última generación con un embrague hidráulico multidisco controlado electrónicamente.
La nueva versión de este modelo cuenta con una distancia al suelo aumentada en 30 milímetros en comparación con el Skoda Octavia Combi y luce el mismo frontal que la última generación de los Octavia, ya que cuenta con un capó más visible, una ancha parrilla del radiador con faros adicionales de apariencia cristalina y faros full-LED con faros delanteros adaptativos (AFS). Los faros antiniebla y los faros traseros también han sido modificados y equipados con tecnología LED.
Tanto el eje frontal como el posterior del Scout están equipados de serie con un bloqueo electrónico del diferencial (EDL), que permite al coche arrancar con suavidad en superficies difíciles.
El motor del Scout está basado en el del Combi y el 2.0 TDI de 150 caballos combinado con tracción a las cuatro ruedas y caja de cambios DSG de siete velocidades es nuevo en la gama.
Además, el actual modelo está equipado con sistemas de infoentretenimiento, como pantallas táctiles capacitivas con un diseño de cristal, un monitor de 9,2 pulgadas y un módulo LTE y ofrece a los pasajeros connexión wifi. La llamada de emergencia automática 'eCall' está disponible como opción.
Asimismo, incluye novedades en sistemas de asistencia al conductor, como 'Trailer Asist', 'Blind Spot Detect' (alerta de cualquier vehículo en puntos ciegos) y 'Rear Traffic Alert' (control el tráfico que viene por los lados y por detrás al maniobrar).
