Actualizado 07/11/2012 12:38

El 41% de las averías por uso incorrecto son por equivocarse de carburante

Gasolina, Gasolinera
EUROPA PRESS


MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

Equivocarse a la hora de repostar combustible es la avería más común entre las que se producen por un uso incorrecto o por una negligencia de los automovilistas, según se desprende del I Informe de Mantenimiento de LeasePlan, basado en las intervenciones sobre su flota de renting.

El informe concluye que el 41% de las averías por negligencia es consecuencia de una equivocación en el repostaje, esto, es, echar gasolina en lugar de gasoil o viceversa. Esta avería impide funcionar el motor y requiere una limpieza de culatas, bujías y del circuito.

Otro de los despistes más frecuentes, con un 25% consiste en olvidar las llaves en el interior del vehículo cerrado. En este caso, si no se dispone de otra copia, la solucion suele pasar por cambiar la cerradura del coche.

Además, el 23% de las averías por uso incorrecto son consecuencia de ignorar deliberadamente los testigos del salpicadero, un 5% se producen por no limpiar el barro de los bajos del vehículo, un 3% por no evitar el sobrecalentamiento del motor y un 2% por no cumplir las revisiones de mantenimiento establecidas por la marca.

En líneas generales, el informe precisa que el 55,8% de las visitas al taller se producen como consecuencia de las revisiones programadas por el fabricante, de forma que sólo el 44,2% corresponde a reparaciones imprevistas.

Dentro de estos imprevistos, el 23,9% tiene su origen en averías simples, un 17,7% en desgastes menores de piezas y un 14,7% en cambios de accesorios. Sólo el 6,2% de las intervenciones responden a averías complejas, como reparaciones del motor, la culata, la caja de cambios o la inyección.

Los coches empiezan a sufrir averías de desgaste mayor a partir de 126.000 kilómetros y averías complejas, desde los 131.000 kilómetros. La estancia en el taller oscila entre uno y diez días, con una media de 4,95 días en el caso de averías complejas.

Para evitar averías, LeasePlan recomienda a los conductores permanecer 30 segundos al ralentí al arrancar el coche, realizar trayectos mixtos en ciudad y carretera, repostar en gasolineras homologadas, revisar los niveles, usar un tipo de aceite específico, realizar el plan de mantenimiento de la marca, observar los testigos luminosos y verificar el estado de los neumáticos.