Unos 1.300 alumnos de la Región sufren dislexia aunque se sospecha que un alto porcentaje no está diagnosticado

Actualizado: martes, 4 febrero 2014 11:59

Adixmur solicita ser reconocidos con beneficio de beca, porque "un niño con dislexia es un niño con un hipoteca"

MURCIA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

Alrededor de unos 1.300 de los 280.000 alumnos escolarizados en enseñanzas no universitarias, esto es desde Infantil a Bachillerato, sufren dislexia, según datos que ha facilitado a Europa Press la directora general de Ordenación Educativa y Atención a la Diversidad, Begoña Iniesta.

No obstante, desde la Asociación de Dislexia y otras dificultades de aprendizaje de la Región de Murcia (Adixmur), su presidenta, Ana Martí, advierte a Europa Press que "un alto porcentaje no está diagnosticado", al mismo tiempo que achaca "la alta tasa de fracaso escolar a las dificultades de aprendizaje, en su mayoría".

A tenor de estos datos, desde el Gobierno regional se ha expresado la preocupación por detectar esta problemática y darle una respuesta en el aula "necesaria, facilitando su educación", explica Iniesta, quien ha advierte que la dislexia "es raro que se detecte antes de la edad de Primaria", llegando incluso a ser detectada a lo largo de toda la vida.

Basándose en las investigaciones de los expertos que conforman el equipo creado en 2010, según la presidenta de Adixmur, específico para las dificultades de aprendizaje, "suele dar la cara en segundo y tercero de Primaria".

No obstante, considera que este grupo está "incompleto", por lo que ha resaltado la necesidad de "cubrirlo con más personal, ya que cada vez se detectan más niños al mismo tiempo que el grupo abarca mucha problemática".

Igualmente, desde Adixmur se solicita ser reconocidos con beneficio de beca, ya que "un niño con dislexia es un niño con un hipoteca". "Que seamos beneficiarios de becas para cubrir la respuesta de las ayudas técnicas", incide.

Es por ello por lo que recientemente el Consejo de Gobierno ha aprobado un convenio entre la Consejería de Educación y Adixmur para ofrecer un apoyo adicional en las aulas a los estudiantes con esta problemática y lograr los mejores resultados en su enseñanza.

"Se entendió la necesidad de tener a los profesores especializados en la materia que trabajan con otros orientadores, de centros, que necesitaban ese apoyo para tratar al alumno con ese déficit", ha subrayado Iniesta.

El objetivo, indica, es que los docentes tengan buenas estrategias para atender a los alumnos que padecen dislexia, además de que hay que tener en cuenta que la mayoría de estos niños "no tienen retraso cognitivo; lo único es que su formación para aprender es diferente".

Para ello, se aporta a los docentes las estrategias para trabajar con estos alumnos en el aula y conseguir el "éxito" educativo en colaboración con la Asociación, "mejorando su proceso educativo" al mismo tiempo que sirve de acercamiento a las familias.

En diciembre de 2012, Iniesta recuerda que se publicó una normativa que establecía unas pautas de evaluación y estrategias metodológicas para que el profesor supiera "cómo deben de atender a estos alumnos y compensar sus déficit de aprendizaje".

Por ejemplo, la utilidad de los conversores de texto en audio o cambiar el modelo de evaluación, así como modificar sus exámenes e incluso leerles los enunciados para que sean capaces de leer lo que se les pregunta son pautas y estrategias que ya se han implantado en los centros educativos.

MURCIA, EN VENTAJA CON OTRAS CCAA

Desde la Asociación, su presidenta explica que los objetivo por los que apuestan son "asesorar y ayudar a las personas con dislexia y otras dificultades de aprendizaje y también a sus familias", así como la labor de concienciar a la sociedad de las necesidades que estos niños presentan.

Martí alerta que hay un "elevado porcentaje" de personas sin diagnosticar y achaca el fracaso escolar, en su mayoría "a las dificultades de aprendizaje". No obstante, valora positivamente que en la Lomce "estén incluidas estas dificultades", pero considera que "falta desarrollarlas, porque de no ser así estaremos en desventaja".

"Falta desarrollar el esfuerzo de estos niños para que el sistema educativo entienda las dificultades de aprendizaje y nos deja huérfanos si no la desarrolla", ha indicado.

Y es que, en comparación con otras comunidades, en el caso de Murcia "llevamos ventaja, ya que las leyes nos amparan" y existen grupos de atención para las dificultades de aprendizaje, aunque reclama un mayor acceso a la información para estos niños "para quitar barreras que permitan acceder al sistema educativo".

Los orientadores acuden una vez por semana a los centros educativos para hacer un diagnóstico a los niños pero desde la Asociación se resalta la necesidad de más días y mayor número de orientadores, además de que "hay falta de profesores para la detección y el apoyo a esos niños".

"No hay personal suficiente para atenderlos y tienen que depender de centros privados", ha manifestado Martí, quien advierte, asimismo, que estos niños "tienen muchas fobias escolares y se sienten tontos".

Por ello, recomienda que "hay que salir para que la dislexia pueda estar introducida con naturalidad en la sociedad y no taparla", como no se tapa por ejemplo una persona que sufre de miopía.

Desde la Asociación hay talleres de orientación para las familias, "que llegan perdidas y es importante que se sientan escuchadas y cuando saben que hay un diagnóstico se relajan". Así como talleres sobre cómo ayudar en casa a estos niños y talleres también con niños de autoconcepto positivo.

LA DISLEXIA

La dislexia es un trastorno de aprendizaje que se caracteriza por una dificultad significativa en el aprendizaje de la lectura y de la escritura, en ausencia de alteraciones neurológicas y/o sensoriales que lo justifiquen, habiendo recibido previamente oportunidades escolares para su aprendizaje.

De origen genético y neurológico, su identificación se realiza mediante un diagnóstico psicopedagógico. Cada niño dislexico es diferente y necesita su método de aprendizaje de tipo multisensorial, de forma que la adecuada comprensión de la dislexia, por parte de educadores y padres, evita efectos negativos sobre el desarrollo psicoafectivo del niño.

El diagnóstico temprano es fundamental, pues el niño podría sufrir consecuencias para su salud como baja autoestima, ansiedad, elevado índice de fatigabilidad, fobia escolar, depresión, problemas de conducta derivados de su continua frustración y rasgos de tipo psicosomático como dolor de cabeza, de tripa, vómitos.

Como norma general, los niños con dislexia suelen presentar dificultad para asociar las letras con sus respectivas representaciones sonoras, su rendimiento lector se sitúa por debajo de su rendimiento verbal, dificultad para trasladar el lenguaje oral a lenguaje escrito y viceversa y para mantener los diferentes componentes sonoros de las palabras en su memoria de trabajo, enlentecimiento en la denominación de objetos, lectura entrecortada y lenta, mala memoria a corto plazo, mejor a largo plazo y presencia de omisiones, sustituciones e inversiones dentro de las palabras.

Así como dificultades en la comprensión de lo leído, faltas de ortografía, y dificultades en la automatización de secuencias (días de la semana, meses del año) y aprenderse las tablas de multiplicar y el alfabeto.