MURCIA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El director general del Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF), Alejandro Zamora, ha recordado este lunes que "la Región de Murcia es la cuarta autonomía con mejor saldo entre los contratos de entrada y los de salida, sólo por detrás de Madrid, Cataluña y Baleares. Es decir, la Región es atractiva para la actividad económica y el empleo, y lo demuestra el hecho de que llegan más trabajadores de los que salen".
Según el último estudio anual publicado por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), y referido al año 2016, el saldo de movilidad laboral es de 26.246 contratos en la Región. Ese número representa la diferencia entre la cifra de los contratos de trabajadores que llegaron a la Región y la de los que salieron a otras provincias.
Únicamente superan en dicha estadística a la Región las comunidades de Madrid, con un saldo positivo que se aproxima a los 220.000 contratos; Baleares, con 48.024, y Cataluña, con 35.931.
Igualmente, hay tan solo otras dos comunidades autónomas (País Vasco y La Rioja) que registran un saldo positivo, mientras que el resto está en números negativos.
La Región fue emisora de trabajadores a otras provincias desde 2010 hasta 2013, el tramo de años más intensos de la crisis, pero en los tres últimos años ha recobrado el carácter receptor que había tenido desde principios de siglo, indican desde el Ejecutivo regional.
"ESCENARIO PROPICIO PARA EMPRENDER"
Alejandro Zamora también ha afirmado que "otro de los datos en los que debemos fijarnos con el fin de determinar si un territorio es atractivo para trabajar es la evolución de sus trabajadores autónomos, que son los que mejor perciben si la actividad económica tiene viabilidad".
En este caso, "la cifra de autónomos está creciendo en la Región más que en España, porque el escenario es cada vez más propicio para emprender y los negocios tienen cada vez una mayor rentabilidad".
Tras lo que ha señalado que "hoy registramos casi mil autónomos más que doce meses atrás, lo que supone un aumento cercano al 1 por ciento, mientras que España está ganando afiliados autónomos a un ritmo cuatro décimas menor, del 0,61 por ciento".
