MURCIA, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil, dentro de los servicios desarrollados para perseguir y prevenir tanto el cultivo como el tráfico de marihuana, ha efectuado medio centenar de actuaciones durante el pasado año, que se han saldado con la detención de 54 personas y la incautación de más de dos toneladas de cannabis sativa en la Comunidad. Hay que recordar que entre estas operaciones, la Benemérita consiguió desmantelar el invernadero clandestino desmantelado más sofisticado hasta ahora de toda Europa, alcanzado un millón de euros el valor de la instalación.
Los indicios obtenidos durante las investigaciones han permitido a la Benemérita detectar un aumento cualitativo en cuanto al modo de producción y los elementos empleados para ello, como la utilización de dispositivos de regadío, calefacción, ventilación e iluminación cada vez más sofisticados.
Los municipios de la Región donde la Benemérita ha llevado a cabo más actuaciones relacionadas con esta actividad delictiva han sido Águilas (9), Murcia (8), San Javier (4) y Mazarrón (4), mientras que la época del año en la que más se concentran las aprehensiones de esta sustancia ha sido en primavera y verano, destacando las aprehensiones en septiembre (969 Kilos), noviembre (710 Kilos), febrero (249 Kilos) y agosto (217 Kilos).
De las 54 personas arrestadas durante 2015, sin embargo, el mayor número de detenciones se da en febrero, con 14 arrestos, aunque también destacan en este ámbito los meses de mayo y septiembre con ocho detenciones cada mes.
Los productores de marihuana utilizan distintos tipos de inmuebles para su cultivo, entre los más comunes se encuentran viviendas habituales, segundas residencias, como casas de campo, o en espacios abiertos, como fincas donde comparten espacio con otras producciones agrícolas.
Algunas plantaciones han llegado a sorprender a los investigadores por el método de ocultación de los invernaderos clandestinos, como sofisticados zulos o azoteas de viviendas. También se dan casos en que todas las estancias del inmueble son utilizadas para la producción y manipulación de esta sustancia.
Con la finalidad de evitar ser sorprendidos por los investigadores, algunos de los ahora detenidos habían instalado circuitos cerrados de televisión (videocámaras) para vigilar los exteriores del inmueble donde se encontraba la plantación.
La mayoría de las investigaciones relacionadas con el cultivo ilícito de la marihuana suelen destapar la producción en exclusiva de esta sustancia, aunque también se dan casos de organizaciones delictivas que distribuyen varios tipos de drogas además de ésta, como la cocaína o el hachís.
Relacionado con el uso de dispositivos más evolucionados, también se ha detectado que la mayoría de invernaderos clandestinos tenían conectado el suministro eléctrico de forma ilegal para evadir el elevado consumo de los dispositivos, es decir, 'puenteado'. Unos fraudes que pueden conllevar fatales consecuencias como el incendio de la instalación y con ello de los inmuebles.
Fruto del análisis llevado a cabo por el Área de Sanidad de la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia sobre las muestras tomadas a los 2.348 kilos de marihuana incautados, así como de las diferentes investigaciones desarrolladas por la Benemérita, en algunos casos se ha podido determinar que el índice de tetrahidrocannabinol (THC) era considerablemente superior a la media común de las incautaciones, debido a la manipulación genética del cannabis.
SERVICIOS RELEVANTES
Entre las operaciones desarrolladas por la Guardia Civil en la Región de Murcia durante 2015 destacan la desarrollada en febrero, donde la Benemérita desmanteló un invernadero para el cultivo intensivo de marihuana instalado en una nave industrial de Torre Pacheco y compuesto en ese momento por más de 200 plantas. En el marco de la operación 'Plaga II', los investigadores detuvieron al responsable de la plantación y se incautaron de numerosos dispositivos de ventilación, calefacción, iluminación y riego.
La operación 'Colchón' se culminó en marzo con la incautación de dos plantaciones de marihuana en la pedanía murciana de Sangonera la Seca y la desarticulación del grupo criminal que se encontraba tras la actividad ilícita que, además, habían conectado ilícitamente el suministro de electricidad y debido al fraude eléctrico, dejaron a oscuras a todo el barrio en varias ocasiones.
También en Sangonera la Seca, un mes después la Guardia Civil volvía a desmantelar otra sofisticada plantación de marihuana, esta vez instalada en un edificio embargado. La operación 'Tonino' finalizó con la desarticulación de un grupo delictivo integrado por siete arrestados que habían destinado diez viviendas del edificio al cultivo y manipulación de la droga.
A finales de mayo y en el marco de la operación 'Cono largo', la Guardia Civil desmanteló una experimentada organización criminal en Cieza, integrada por 13 miembros, que se dedicaba a distribuir marihuana entre otras drogas.
En los cinco registros domiciliarios efectuados se les incautaron tres kilos de marihuana dispuesta para su inminente distribución. Además, los arrestados estaban involucrados en la autoría de varios robos en viviendas.
En las pedanías murcianas de Gea y Truyols y La Alberca, la Guardia Civil desarrolló, a finales de junio, la fase de explotación de la operación 'Bedas', con un dispositivo compuesto por medio centenar de efectivos que efectuaron sendos registros en viviendas y que se saldó con la detención de cuatro personas que, presuntamente, dirigían dos invernaderos clandestinos con más de medio millar de plantas.
Además, se les incautaron cinco kilos de cogollos de marihuana. Ambas instalaciones tenían 'puenteado' el suministro eléctrico, con el consiguiente riesgo de incendio.
La operación 'Santo Job' culminaba en octubre con la desarticulación de una organización criminal dedicada al macro cultivo de cannabis y su exportación a Holanda. En total se detuvo a ocho personas, entre ellos los dos cabecillas de la red delictiva, y se incautaron 6.000 plantas de marihuana en un invernadero instalado en una nave industrial de Molina de Segura, cuyos suministros de electricidad y agua fueron manipulados fraudulentamente. Se trataba del invernadero clandestino desmantelado más sofisticado de Europa, ejecutado por expertos en conocimientos agrarios y tecnológicos, valorando la instalación en un millón de euros aproximadamente.
También en octubre, la Guardia Civil desmanteló un grupo delictivo integrado por tres personas, asentado en La Matanza-Santomera y dedicado al cultivo clandestino de marihuana, así como a su posterior manipulación y distribución. El invernadero artesanal desmantelado tenía una elevada capacidad de producción, estimando que pudiera cultivar más de medio millar de plantas en cada cosecha y varias cosechas anuales.
A finales de año, la Guardia Civil y la Policía Local de Lorca, de forma conjunta, desarrollaron la operación 'Heno verde', para desmantelar cuatro plantaciones de marihuana clandestinas con más de 2.000 plantas, ubicadas en el término municipal de Lorca.
La operación se saldó con la detención de tres personas, las cuales contaban con avanzados conocimientos en el cultivo del cannabis y utilizaban fitosanitarios específicos para incrementar la producción y su efecto estupefaciente.
