MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
Varios sociólogos coinciden en que las protestas de jóvenes en más de medio centenar de ciudades españolas, convocados por la plataforma Democracia Real Ya, serán "episódicas" porque se trata de un movimiento "sin ideología" que "no tiene espacio en una democracia parlamentaria".
En declaraciones a Europa Press, el catedrático de Sociología de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) Ricardo Montoro Romero señala que si bien se trata de un fenómeno "interesante", tiene un "problema" de identificación social, pues "no se sabe qué es exactamente, cuál es el mensaje, qué ideas tiene o quién está detrás".
"Sólo llegan retazos sueltos y no hay una visión de conjunto. No sabemos de qué estamos hablando y no podemos responder plausiblemente a la pregunta de cuál es su identificación social e ideológica", afirma este catedrático, que asegura también que este movimiento se identifica más con la izquierda política, "con algunas dosis" de fórmulas antisistema. "Antisistema quiere decir antidemocrático y lo único que sustituye a un sistema democrático es el totalitario", advierte.
Montoro subraya que, en el caso de que se pretenda alcanzar un mayor recorrido, el movimiento tendrá que transformarse en una oferta política concreta. "En el momento en que esto toma forma, adquiere una ideología que tiene que tener una cierta posición y, si va a más, necesitará un ideario de identificación porque así funcionan las democracias representativas", ha argumentado.
Al catedrático de Opinión Pública y Ciudadanía de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) Fermín Bouza le "sorprende" el momento elegido por los manifestantes, una semana antes de las elecciones autonómicas y municipales del 22 de mayo. "El movimiento es una necesidad porque la gente tiene que moverse y no hay nada especialmente negativo, lo que es raro es el momento", apostilla.
Frente a la reivindicación de que ningún partido mayoritario responde a las necesidades de sus ciudadanos, Bouza asegura que "no se puede olvidar" que las formaciones políticas son la base de la democracia y, por tanto, le resulta "despiadado" que este movimiento "ataque a todos por igual".
"Puede resultar negativo que sea un movimiento incontrolado, sin genealogía e intenciones conocidas, al margen de que sean o no justas", alerta este experto que asegura que "sin una ideología, se camina a ciegas". En su opinión, "no son suficientes exclusivamente las consideraciones materiales y salariales" para crecer como movimiento.
