MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha reprochado a la Comunidad de Murcia que promueva la suspensión de los aforamientos de diputados y miembros del gobierno regional de manera individual y recuerda que la revisión del sistema procesal penal debería hacerse conjuntamente para "evitar paradojas" entre presidentes autonómicos.
Durante su participación en un desayuno informativo organizado por El Economista, el ministro ha asegurado que ha llegado el momento de "plantearse con firmeza" la reforma sobre los aforamientos ya que "no están los tiempos para defender sistemas singulares para políticos".
"Los aforamientos son percibidos por los ciudadanos como un privilegio impropio y habrá que revisarlos pero con carácter general no en una comunidad autónoma para generar paradojas de que un presidente no esté aforado y otro sí", ha defendido el ministro, que ha recordado que de 200.000 personas aforadas únicamente 2.000 son cargos políticos.
Catalá también ha apuntado que buscará el consenso con el resto de formaciones políticas en el Congreso de cara a otorgar la investigación penal a los fiscales en un sistema procesal que prime la tutela de derechos y libertades. En este contexto, ha dicho, la acusación popular debería ser "radicalmante reducida" tanto en el sentido subjetivo --quién podría ejercitarla-- como en el objetivo --para qué tipo de delitos--.
Así ha reivindicado que se respete la presunción de inocencia para las personas que están siendo investigadas en diferentes causas judiciales asegurando que anticiparse a la culpabilidad de estas personas puede hacer "mucho daño" a su reputación ya que puede ocurrir que se archiven sus causas y el perjuicio causado a las mismas sea "un daño reputacional y personal irreparable".
"EL RUIDO NO AYUDA A LA REFLEXIÓN"
De cara a lograr un pacto en materia de Justicia, Catalá ha advertido de que "el ruido no ayuda a la reflexión" y si se quiere conseguir un pacto --Estrategia Nacional de Justicia--, se necesita del trabajo conjunto de los agentes judiciales y partidos políticos.
"La reforma de la Justicia es el gran proyecto que nos debe concitar a todos y al que vamos a dedicar todo nuestro esfuerzo (...). La Justicia penal está llamada a reformarse y tenemos que decidir si seguimos con un modelo del siglo XIX o avanzamos hacia un sistema en un contexto de garantías y tutela judicial efectiva", ha asegurado.
Por ello ha instado a hacer una mejor gestión de los recursos de la Administración de cara a conseguir una Justicia más eficiente ante "los graves déficits", si bien ha descartado que esta sea "la hermana pobre" en comparación con la dotación presupuestaria que reciben otras carteras ministeriales.
