MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) - A su entender, esa falta de estrategia ha llevado a "ignorar la necesidad de articular discursos y políticas movilizadoras de los millones de catalanes que no están dispuestos a secundar los saltos hacia el abismo". Incluso habla de errores de opinión que han mostrado una "rara combinación de triunfalismo y banalización" de lo que ocurría en Cataluña mientras el 'procés' avanzaba. Y en esta "hora crítica" y ante un "inocultable vacío", alaba el mensaje del Rey, en el que emplazaba a los "legítimos poderes" del Estado a asegurar el orden constitucional en Cataluña. Según dice, la nación española ha encontrado "de nuevo" en la Corona "su mejor intérprete, sensibilidad, aliento para superar esta crisis y fortaleza en la defensa de la unidad y permanencia de España". A cinco días de que el Pleno del Parlamento catalán debata sobre la declaración unilateral de independencia, FAES resalta que hay por delante "decisiones apremiantes que pueden resultar críticas", en alusión velada a mecanismos como el artículo 155 de la Constitución --que no menciona en ningún momento-- y que permite al Estado a adoptar las medidas necesarias para obligar a una comunidad autónoma al "cumplimiento forzoso" de sus obligaciones. Según destaca, ahora urge enfrentar "no un simple desafío, sino un ataque frontal a la ley, a la democracia" y a los derechos de los ciudadanos. "A España, en suma. Un ataque que está en curso y que no ha perdido posiciones desde que se inició. Al contrario. Hasta el punto de que sus primeros responsables continúan desarrollando sin mayor obstáculo su actividad ordinaria", se queja. Por todo ello, emplaza al Gobierno del PP a "activar toda la potencia política prevista para la defensa de la Constitución" y no buscar excusas para continuar "en la inacción" ni "ampararse en cálculos de oportunidad, eficacia o coste". "El Gobierno debe actuar tal y como la nación necesita que lo haga. Buscando cuantos apoyos pueda, pero sin ellos si eso retardara o condicionara el cumplimiento de su mandato constitucional", asegura, para añadir que "la ley es el precio de la libertad, la libertad es el premio de la ley". Es más, FAES subraya que si el Ejecutivo de Mariano Rajoy no encuentra el "ánimo" para actuar o tuviera que reconocer "su incapacidad", debería "otorgar a los españoles la posibilidad de decidir qué gobierno, con qué propuesta y con qué apoyo electoral se deberá hacer frente a esta coyuntura crítica para España". Asimismo, en su análisis, la fundación de Aznar señala que no se ha entendido que, junto al nacionalismo radicalizado, en la reivindicación secesionista han confluido el populismo antisistema y el revisionismo del pacto constitucional que, según dice, desde hace tiempo viene promoviendo un amplio sector de la izquierda "decidida a destruir la Transición, como pacto y como narrativa de reconciliación entre los españoles". A su entender, de todo ello hay antecedentes demasiado próximos como para ignorarlos, porque es esa confluencia de secesionistas, populistas antisistema y revisionistas de la Transición "la que está situando al Estado democrático en esta encrucijada". A todo ellos, subraya, les une el objetivo de "demoler el sistema constitucional de 1978" y, de nuevo, "la pulsión enfermiza de excluir mediante su demonización a la representación política del centro derecha español, que representa mayoritariamente el PP.