MADRID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) - Todos han optado por celdas individuales, que son totalmente blancas, de seis metros cuadrados, sin ventanas, y sin esquinas ni picos ni elementos que permitan que el detenido pueda proceder a autolesionarse. Además, cuenta con una cama simple, con colchón y mantas si lo pide el recluso y las aperturas y los cierres son automáticos.