La juez togada sienta en el banquillo a 6 tripulantes y al cocinero del Juan Sebastián Elcano por tráfico de cocaína

El buque escuela 'Juan Sebastián Elcano'
EUROPA PRESS/BASE NAVAL DE ROTA
Actualizado: miércoles, 26 octubre 2016 18:43

Una de las defensas pide a la juez que aclare a quien se imputa el cargamento en el barco de la mayor cantidad de droga

MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

La jueza togada militar número 12 ha procesado por un delito contra los deberes del servicio a bordo y otro contra la salud pública a los seis tripulantes y el cocinero investigados desde el verano de 2014 por traficar con cocaína aprovechando su estancia en el buque-escuela de la Armada "Juan Sebastián Elcano".

Los siete ocupantes del buque que se sentarán en el banquillo por estos hechos son el cabo segundo José Ramón D.C.; los marineros Francisco Ramón M.S., Francisco V.B. y Rafael V.H.; el exmarinero Jimmy E.V.; el cabo Manuel Jesús R.F. y el civil Manuel Francisco S.P., según detalla el auto de procesamiento al que ha tenido acceso Europa Press que tiene fecha de este lunes.

En el auto se detallan los hechos de los que la Guardia Civil fue advertida por la agencia norteamericana Homeland Securty Investigations (HSI-ICE) el 13 de junio de 2014.

Los estadounidenses denunciaban que durante el desarrollo de una investigación contra traficantes de cocaína en New Jersey habían detenido a varios de sus integrantes junto con aproximadamente 25 kilos de cocaína que les habría sido entregada, presuntamente, por varios tripulantes del "Juan Sebastián Elcano" que había atracado en el Puerto de Nueva York entre el 10 y el 14 de mayo de ese año.

Los tripulantes habían sido identificados por los agentes especiales estadounidenses resultando ser los marineros del buque-escuela Francisco, Rafael y Jimmy, que fueron observados cuando hicieron entrega de la sustancia estupefaciente que presuntamente habrían recogido en Cartagena de Indias (Colombia) en una escala anterior del buque.

En agosto de 2014 la investigación se amplió sobre la presunta participación en los hechos del marinero Francisco Ramón y el cabo Manuel Jesús, que prestaban servicio en las máquinas del buque, gracias a unos datos aportados a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil por la agencia estadounidense DEA sobre la organización delictiva que actuaba en Nueva York.

APREHENSIÓN EN EL BUQUE

Según esos datos, los marineros españoles habrían entregado a estos narcotraficantes 10 kilos de cocaína y otros de heroína procedentes de Colombia. Posteriormente, las autoridades del grupo escuela aprehendieron a los marineros Francisco y Rafael numerosos paquetes de cocaína cuando el barco se encontraba atracado en la bahía de Cádiz a finales de julio de ese año. Cuando avanzaron las investigaciones también fue detenido el cocinero del buque Manuel Francisco 'El Naca' y el cabo segundo José Ramón por colaborar con los anteriores.

Según la juez, hay que tener en cuenta el buque-escuela no era sometido a los controles aduaneros de los puertos internacionales en los que atracaba, lo que habrían aprovechado los procesados junto al hecho de que personal de la dotación no estuviera sometido a registro alguno en el embarque y desembarco por parte de la Guardia Militar.

La droga, según ha concluido la investigación, habría sido embarcada en el buque durante su estancia en el Muelle de Edurbe de Cartagena de Indias, donde estuvo atracado entre el 14 y el 19 de abril de ese año. La juez atribuye al cocinero el papel de "intermediario" para que la operación se llevara a efecto mediante un contacto colombiano, Joaquín P.Z, 'Mondongo', respecto de quien la juez solicita actuación a la Fiscalía de Cartagena de Indias.

La defensa de uno de los acusados, que ejerce el letrado Fernando Pamos de la Hoz, ha solicitado al Juzgado Togado una aclaración del auto de procesamiento puesto que en él no se detalla a cuál de los procesados se le imputa concretamente el cargamento de droga desde Colombia.

9.000 DÓLARES CADA UNO POR EL TRANSPORTE

Aporta igualmente la juez el dato de que los tripulantes habrían cobrado por su actuación 9.000 dólares cada uno pese a que se les había prometido cobrar 16.000 por cápita. Respecto del cabo segundo, el auto precisa que habría obtenido 1.000 euros por consentir que la droga se escondiera en la dependencia donde prestaba servicio.

En la causa figuran conversaciones telefónicas y vía 'Whatsapp' recuperadas que vendrían a demostrar la implicación de todos los procesados en los hechos según la instrucción realizada.

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