El secretario general pedirá a los aliados un esfuerzo para la formación de las fuerzas de seguridad afganas
BRUSELAS, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Defensa de la Alianza Atlántica analizarán hoy durante la reunión que mantendrán en el cuartel general de la OTAN en Bruselas las prioridades de gasto en el marco de la política general de ahorro que pretende impulsar su secretario general, Anders Fogh Rasmussen. El grueso del ahorro se hará vía los programas de infraestructuras militares, pero Rasmussen también planteará reorganizar las agencias y racionalizar los cuarteles militares.
Aunque es consciente de que los presupuestos nacionales de los miembros de la Alianza están sujetos a una "gran presión" y que cuando se reducen las partidas para sanidad, educación o pensiones es "difícil" evitar que la defensa sea una excepción, Rasmussen ha pedido no recortar "demasiado" o en la "dirección inadecuada" porque "se pondría en peligro la seguridad en el futuro".
"Después de todo la prosperidad económica también depende de la seguridad", dijo Rasmussen en una rueda de prensa en la que expuso los principales asuntos de la cita que reunirá a los ministros mañana jueves y pasado viernes. A la reunión acudirá la titular española de Defensa, Carme Chacón, tras inaugurar un seminario organizado por la presidencia española de la UE en el Parlamento Europeo sobre antipiratería que tendrá lugar a las 9.00 horas.
La cita de los ministros de Defensa comienza a las 10.00 horas con la reunión del Consejo Atlántico, donde se abordará la cuestión de los recursos y capacidades. A las 13.00 horas habrá un almuerzo de trabajo con los países que no son miembros de la OTAN pero participan en la fuerza militar de Kosovo (KFOR), para hablar de la paulatina reducción de los actuales 10.000 efectivos desplegados hasta los 5.700.
Esta disminución no se hará probablemente hasta el otoño y, en todo caso, no antes de conocer la sentencia del Tribunal Penal Internacional sobre la denuncia presentada por Serbia contestando la independencia de su antigua provincia, ante el temor de que el dictamen pueda generar conatos de inestabilidad en la región, según señalan fuentes aliadas. Rasmussen ofrecerá una rueda de prensa a las 15.00 horas para dar cuenta de las conclusiones de la primera sesión de trabajos.
A las 17.00 horas se reunirá el Grupo de planes nucleares para estudiar el sistema de defensa antimisiles que el secretario general quiere sacar adelante en la cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza el próximo mes de noviembre en Lisboa. No obstante, algunos aliados creen que todavía faltan muchos destalles sobre el coste, funcionamiento técnico, mando y control del sistema.
Tampoco se descarta que reaparezca de nuevo la iniciativa de los cinco aliados --Alemania, Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos y Noruega-- que preconizan el desarme nuclear en la OTAN con el argumento de que el armamento táctico no tiene valor militar, un debate incómodo para Francia o Italia en el que España defiende contar con una mezcla apropiada de elementos nucleares y convencionales.
Durante la cena, que será a las 20.00 horas, se tratará el asunto estrella de la próxima cumbre: el nuevo concepto estratégico de la OTAN. Además, se hablará de las reformas de la Alianza y de la posibilidad de reducir la actual estructura de mandos militares. Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido o Italia están a favor pero el resto prefiere esperar a la aprobación del nuevo concepto estratégico y ver luego qué tipo de estructura se requiere. La OTAN cuenta en la actualidad con 12 cuarteles generales y 13.500 efectivos.
AFGANISTAN
El viernes la jornada está dedicada a Afganistán. El Consejo Atlántico se reunirá con los países que participan en la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF) desde las 9.45 hasta las 12.30 horas. El general al mando de las fuerzas internacionales, Stanley McChrystal, mantendrá un intercambio de puntos de vista con los ministros sobre la marcha de la llamada 'Yirga de la paz' afgana y la puesta en marcha de la transferencia de responsabilidad a las fuerzas de seguridad locales.
En este contexto, Rasmussen volverá a pedir a los ministros de Defensa un esfuerzo para culminar con éxito la formación de miembros del Ejército y la Policía afganos y facilitar que asuman el liderazgo en las tareas de seguridad. Todavía hacen falta 450 formadores de los 2.300 necesarios para entrenar a 134.000 soldados y 300.000 policías afganos.
El máximo responsable de la Alianza destacó que la misión de formación desplegada hace seis meses está ya cosechando sus frutos y presumió de que el Ejército afgano logrará con tres meses de antelación el objetivo fijado para 2010 de contar con 134.000 miembros.
El máximo responsable de la Alianza cree que los talibanes no estarán motivados para implicarse en un proceso de reconciliación nacional a menos que se den cuenta de que "no tienen ninguna posibilidad de ganar esa batalla militarmente". En esta línea, apostó por continuar con la operación militar porque, a su juicio, "cuanto más fuerte sea el gobierno afgano mejores serán las posibilidades de reconciliación y de reintegración".
