El sábado 17 de junio el partido debatirá la Ponencia Marco que guiará el rumbo de la formación los próximos años
MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, aspira y está determinado a mantener íntegro el programa político con el que se presentó a las primarias y sobre el que se pronunciará el millar de delegados que han de aprobar, en el 39 Congreso Federal, la nueva dirección --Ejecutiva-- que trabajará con el líder y las directrices políticas que guiarán el rumbo de la formación en los próximos años, han informado a Europa Press fuentes de su entorno.
La Ponencia Marco que encargó la Gestora del PSOE fue elaborada en un primer momento por el diputado Eduardo Madina y el economista José Carlos Díez, mientras que el equipo de Pedro Sánchez hizo su propio documento titulado "Por una nueva socialdemocracia".
Sin embargo, tras la contundente victoria de Sánchez en las primarias, Madina y Díez renunciaron a defender un documento que iba a ser enmendado por las propuestas del nuevo líder, que se ha garantizado una mayoría de delegados --en torno al 60 por ciento-- afín a sus postulados en los congresillos provinciales en los que el partido eligió a sus representantes con derecho a voto en el cónclave federal de los próximos 16 a 18 de junio.
De hecho, de las 15.846 enmiendas que ha recibido la Ponencia Marco de Madina y Díez desde las distintas federaciones, cerca de la mitad se corresponden con el programa íntegro de Sánchez, lo que agrupando todas aquellas que se reiteran, reduce las enmiendas a menos de 7.000.
Además, el hecho de que desde muchas agrupaciones se haya presentado en forma de enmiendas a la Ponencia Marco el programa con el que Sánchez se presentó a las primarias reafirma al equipo del líder en su determinación de no rebajar sus planteamientos.
Esta semana representantes de la Gestora --que no se disolverá hasta el Congreso Federal, pero que ha dejado en manos del nuevo líder las decisiones políticas-- mantuvieron un encuentro con miembros del equipo de Sánchez para organizar los trabajos en torno a la Ponencia Marco y las enmiendas presentadas de cara al Congreso Federal.
Teniendo en cuenta que la Ponencia que elaboró la Gestora ha quedado superada por los acontecimientos, el equipo de Sánchez plantea como solución elaborar un nuevo documento base para el Congreso que incorpore "íntegramente" el programa con el que el líder se presentó a las primarias, al que se pueden añadir partes del documento elaborado por Madina y Díez, según las fuentes consultadas.
El texto definitivo del que será el programa político del PSOE hasta el próximo Congreso --normalmente, dentro de cuatro años-- se debatirá el sábado 17 de junio. Tres comisiones compuestas por algo más de 300 delegados cada una se dedicarán a analizar las distintas temáticas que abordará el documento y que versarán sobre propuestas políticas y económicas socialdemocrátas, junto con un nuevo modelo orgánico de partido.
LAS PRINCIPALES PROPUESTAS DE SÁNCHEZ
Dentro de su programa, Sánchez plantea "una reforma constitucional federal" que mantenga la soberanía en el conjunto del pueblo español, pero que perfeccione "el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado apuntado en el artículo 2 de la Constitución".
Quiere prohibir la revocación de un secretario general en contra del deseo de los militantes y obligar a consultar a los afiliados los acuerdos postelectorales.
Otra de sus medidas destacadas es establecer el sistema de primarias abiertas -en las que puedan también participar simpatizantes del PSOE (previa inscripción) no sólo militantes-- para la elección de candidatos a la Presidencia del Gobierno de España y de los Ejecutivos autonómicos, así como a las alcaldías y la cabeza de lista al Parlamento Europeo.
Sánchez quiere poner coto también, con carácter general, a la posibilidad actual de asumir dos cargos orgánicos. Así, no sería posible formar parte de la Ejecutiva Federal siendo secretario general a nivel regional, por ejemplo.
En un plano más teórico, Sánchez quiere que la Ponencia Marco admita que fue un "fracaso" el modo en que los socialistas gestionaron el resultado de las elecciones de diciembre de 2015 y junio de 2016, que condujo a un inédito y largo periodo de Gobierno en funciones de diez meses en el que "el PSOE al final se limitó a dejar el camino expedito al PP".
