Dice que el conflicto en torno al Canal de Panamá daña la imagen exterior de España y que la capacidad de incidir en Venezuela es "escasa"
MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Real Instituto Elcano, Emilio Lamo de Espinosa, ha afirmado este lunes que "un Sáhara independiente no sería viable como Estado propio", y sí lo sería "bajo soberanía probablemente marroquí, pero con un alto grado de autonomía y autogobierno".
"Pensamos que un Sáhara independiente no sería viable como Estado propio, y, por tanto, estamos obligados a buscar un entendimiento bajo soberanía probablemente marroquí pero con un alto grado de autonomía y autogobierno", ha manifestado en una entrevista en RNE recogida por Europa Press, insistiendo en la necesidad de "reconducir el proceso hacia esa dirección".
Así, ha subrayado la necesidad de "convencer a las partes" para conseguir un "entendimiento entre Marruecos y Argelia" e "impulsar un crecimiento económico" en la zona del Magreb. En su opinión, la región del Magreb "es una de las zonas claramente prioritarias para la política exterior española" y "con mayor riesgo". "Es la única frontera de Europa con África" y "una de las mayores fronteras socioeconómicas del mundo", ha recalcado.
Además, se ha mostrado a favor de limitar la Justicia universal en España, ya que en su opinión, "carece de sentido" intentar "ir más allá de tu altura" y de "lo que tu capacidad te permite". Así, ha negado que España esté "en capacidad de juzgar todos los casos", y cree que no se trata de haber cedido ante "las presiones de China", sino que es" para controlar los alcances y no levantar falsas expectativas".
ESPAÑA DEBERÍA TENER MÁS PESO INTERNACIONAL DEL QUE TIENE
Sobre la posición internacional de España recogida en el Informe del Real Instituto Elcano que será presentado este lunes, ha avanzado que al "cuantificar el peso de los países" a nivel internacional, han concluido que España, aunque está "en la undécima posición", está "peor de lo que podría estar". Según su análisis, España "es una potencia media con activos importantes", y por ello, "debería jugar un peso comparativamente mayor del que está tomando", y se sitúa al nivel de Canadá y "claramente por encima de Italia".
No obstante, ha dicho que la posición actual permite al país tener "un papel relevante" en el ámbito internacional, aunque en caso de querer tener más "debe ir unido a la Unión Europea". En este sentido, ha subrayado que "para España es fundamental una Europa fuerte con una política exterior y de seguridad fuerte".
Además, respecto a la imagen exterior de España ha reconocido que existe un "deterioro" en la denominada marca España, aunque "no tan marcado como el que se percibe aquí". "La percepción que los españoles tenemos es mucho peor que la de los extranjeros", ha dicho, apuntando que los españoles son "los más autocríticos" en este sentido.
Preguntado por la situación en Cataluña, ha hecho hincapié en que es una tema de "política interior". Sin embargo, ha abogado por "avanzar en la idea" de que en el marco de la política exterior, "se puede obtener potencial y rendimiento" de la participación de las comunidades autónomas y del Estado compuesto y "plural" de España y no tiene por qué verse "como un problema".
"En lugar de verlo como un problema", ha señalado, hay que verlo "como un activo" que hace posible "ofrecer una imagen de tolerancia pluralidad, pluralidad lingüística" que permitiría "obtener una rentabilidad en el marco de la Constitución".
LO QUE OCURRE EN PANAMÁ "DAÑA LA IMAGEN" Y "PERJUDICA A ESPAÑA"
En relación con la situación del Canal de Panamá, ha reconocido que sí "afecta a la imagen" de España en el exterior, aunque cree que el Gobierno "está haciendo lo que puede". "Nos perjudica y daña la imagen exterior de España lo que está pasando actualmente", ha asegurado.
Por otro lado, respecto a la situación en Ucrania, ha dicho que el porvenir del país depende de "las tensiones exteriores y de las Fuerzas Armadas". En esta misma línea, se ha pronunciado sobre Venezuela y ha matizado que España "lo que puede hacer es continuar apoyando un proceso de democratización", porque la capacidad de incidir es "escasa".
