MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) - El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunciará este jueves su nuevo Gobierno que prevé introducir cambios relevantes en el organigrama con respecto al reparto que él mismo diseñó en diciembre de 2011. De hecho, ha pedido a sus colaboradores informes sobre las estructuras ministeriales en otros Ejecutivos europeos, según han informado a Europa Press fuentes próximas al presidente. Si en 2011 proyectó un gabinete compuesto por 13 ministerios --el gobierno con menos carteras de la democracia-- y una sola vicepresidencia, algunas fuentes apuntan que ahora Rajoy quiere hacer modificaciones y adecuar su Ejecutivo a este nuevo ciclo político, en el que el diálogo y la cintura política serán dos elementos clave que tendrán que acompañar a los nuevos ministros en su tarea diaria. Aunque se da por hecho que habrá como mínimo tres o cuatro caras nuevas en el Consejo de Ministros (Alfonso Alonso, José Manuel Soria y Ana Pastor han dejado el cargo estos meses), las fuentes consultadas advierten de que el cambio en el organigrama puede ser lo más llamativo de este jueves a la hora de valorar el nuevo equipo. Con ese objetivo, Rajoy ha consultado a miembros del Gobierno y a cargos territoriales, con los que ha intercambiado impresiones sobre la mejor forma de atender las necesidades que se avecinan en esta legislatura, en la que los 137 diputados del PP obligarán a buscar consensos con socialistas, Ciudadanos, CC o los nacionalistas del PNV. El objetivo de esos contactos ha sido recabar sugerencias sobre los posibles cambios de estructura y sobre posibles ministrables en algunos casos. El equilibrio territorial es uno de los factores que se suelen tener en cuenta en el reparto ministerial para satisfacer, en la medida de lo posible, al mayor número de regiones. De hecho, hasta ahora casi siempre han tenido cabida en el Gobierno de España ministros de origen catalán, andaluz o vasco. En esa misión de recabar ideas, Rajoy incluso ha pedido a sus colaboradores más cercanos que le faciliten informes sobre el reparto ministerial en otros Gobiernos europeos, han indicado las fuentes consultadas. Rajoy ha dedicado estos días a ver qué ministerios podrían fusionarse o desagregarse, algo que acarrearía además importantes cambios en las distintas Secretarías de Estado. Así, las mismas fuentes creen que podría recuperar Administraciones Públicas; estructurar mejor las funciones del Ministerio de Industria y del de Economía; o perfilar más nítidamente las funciones que tiene Empleo y las que tiene el Ministerio de Sanidad y Asuntos Sociales. Una de las claves será ver si Rajoy finalmente opta por crear una Vicepresidencia económica como tuvo José María Aznar en su día. Fuentes del PP incluso especulan con la posibilidad de que impulse una Vicepresidencia Social para acercarse tanto a socialistas como al partido de Albert Rivera. También está encima de la mesa la posibilidad de que Rajoy vuelva a agrupar las áreas de Economía y Hacienda en un único Departamento, si bien fuentes de Moncloa ven más factible la continuidad del organigrama actual por considerar que Luis de Guindos y Cristóbal Montoro han trabajado bien como equipo, uno "fuera" de España y el otro "dentro". Rajoy dará a conocer su nuevo Gobierno casi cinco días después de haber sido investido presidente del Gobierno, un espacio de tiempo que ha hecho crecer los nervios tanto en los miembros del Ejecutivo que quieren repetir como en los cargos del PP que aspiran a ser "elegidos". Una de las principales claves este jueves será ver si María Dolores de Cospedal entra o no a formar parte del Gobierno. Algunas fuentes del partido consideran que Rajoy la premiará con una cartera de peso mientras que otras apuntan a que podría compaginar un asiento en el banco azul con la Secretaría General del PP, un puesto en el que desearía continuar, según algunas fuentes. También habrá que ver si la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría mantiene sus actuales competencias (es también ministra de la Presidencia, portavoz del Ejecutivo y el CNI está bajo sus órdenes) y si continúan en el Gobierno los ministros más polémicos en esta legislatura como el titular de Interior, Jorge Fernández Díaz, reprobado hace un par de semanas por la oposición en el Congreso por el caso de las grabaciones. En las filas del Partido Popular dan por hecho que tienen bastantes papeletas para repetir Isabel García-Tejerina, Iñigo Méndez de Vigo o Rafael Catalá, ministros que se han incorporado en la última etapa y que "no están quemados". Eso sí, alguno de ellos podría cambiar de cartera, según estas fuentes. Desde el partido también sitúan en la casilla de salida a segundos niveles estos cuatro años y que han hecho un "buen trabajo" como el secretario de Estado de relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, el director de la Oficina Económica de Moncloa, Álvaro Nadal, o el jefe de gabinete de Rajoy, Jorge Moragas. Habrá que ver si finalmente Rajoy les deja en sus actuales responsabilidades o les hace ministros. Fuentes del PP ven más complicado que Rajoy mueva del banquillo a alguno de los jóvenes vicesecretarios pero sí que apuntan a la posibilidad de que recompense al actual portavoz parlamentario, Rafael Hernando, dándole una cartera en el nuevo Gobierno. Por la cuota territorial, en el partido ven con opciones a la expresidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi; el actual vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda o la exportavoz del Parlamento gallego Pilar Rojo. Otras fuentes del partido consideran que Rajoy podría fichar en esta nueva etapa a alguna persona con un destacado perfil profesional y un buen currículum, que siente bien en las filas de Ciudadanos e incluso del PSOE.
