MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla, insistió hoy en que el taxista que le condujo ayer al Palacio de La Moncloa, fue elegido en "un sorteo o algo parecido", realizado "sin contar" con él y explicó que aceptó que fuera "al que le había tocado" por "no desairar" al "grupo" de taxistas que así lo había decidido. "Yo no le conocía para nada", aseguró.
En declaraciones a Punto Radio recogidas por Europa Press, Revilla fue preguntado por las informaciones aparecidas hoy en prensa, según las cuales el taxista, que conversó con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante unos minutos, desveló que fue elegido por "enchufe".
El presidente cántabro explicó que "una especie de grupo" de taxistas había "debido decidir quién" le tenía que llevar esta vez. "Me llamó un señor para decirme que si tenía inconveniente en que este señor me llevase, porque había sido objeto de un sorteo o algo parecido", señaló Revilla, que respondió explicando que normalmente coge el taxi "en la puerta sin preguntar quién es".
Según el presidente, su interlocutor le pidió que aceptara "por no quedar mal", porque el taxista "tenía mucho interés". "Pero yo la primera vez que le he visto la cara ha sido ayer en el hotel", insistió.
Revilla aseguró que el conductor es "un chaval muy majo" y destacó que el jefe del Ejecutivo estuvo "muy simpático" con él, cuando intercambiaron unas palabras en La Moncloa. Además, explicó que "naturalmente" le pagó la carrera y aseguró que, a pesar de que tenían que salir del hotel a las 10.30 horas, el taxista llegó con antelación: "A las nueve y media ya estaba el tío allí. Salí y le dije 'Oye, que es a las diez y media, no pienses que te voy a pagar el viaje desde ahora'".
Respecto a su reunión con el jefe del Ejecutivo, el presidente cántabro aseguró que lo encontró "bien, con buen ánimo y con muy buen aspecto y relajado". "No le he encontrado nervioso, porque en este momento lo peor que le puede pasar a un dirigente es que esté nervioso", agregó.
