MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este miércoles que "todos" tienen que ser "muy respetuosos" con las decisiones judiciales tras los pronunciamientos del Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional sobre el diputado electo Jordi Sànchez, ya que, según ha dicho, "nadie" se puede tomar "la justicia por su mano" porque eso diría "muy poco de la calidad de sus comportamientos democráticos".
Así se ha pronunciado después de que el Constitucional se haya opuesto a liberar a Sánchez y el juez del Supremo Pablo Llarena, que instruye la causa contra el 'procés', no vaya a decidir sobre este asunto hasta el lunes, el mismo día en que el presidente del Parlament, Roger Torrent, ha convocado un pleno para investir al expresidente de la ANC.
"Todos tenemos que ser muy respetuosos con las decisiones de los tribunales", ha manifestado Sáenz de Santamaría antes de presentar dos libros sobre el futuro del Parlamento en el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales (CEPC), uno bajo el título 'Parlamento Abierto. El Parlamento en el siglo XXI' y otro 'El Parlamento abierto en el mundo, evolución y buenas prácticas'.
La vicepresidenta ha recordado que Jordi Sànchez decidió recurrir en amparo al TC el auto que decretaba su permanencia en prisión --donde está desde el pasado 16 de octubre-- y el tribunal de garantías "ha resuelto que está bien adoptado". "Ahora será el Tribunal Supremo el que en su caso tendrá que responder oyendo a las partes sobre esa petición", ha agregado.
Dicho esto, ha solicitado "a todos" respetar las decisiones de los tribunales "porque son los árbitros de estas decisiones". "Y conviene que nadie se tome la justicia por su mano porque entonces dirá muy poco de la calidad de sus comportamientos democráticos", ha advertido.
¿QUÉ HAN DICHO EL TC Y EL SUPREMO?
En concreto, el juez Llarena, que instruye la causa contra el 'procés', ha dictado una resolución este miércoles en la que da traslado a Fiscalía y a la acusación popular, ejercida en representación de Vox, para que en un plazo de máximo de cinco días informen sobre la petición realizada por Jordi Sánchez de ser excarcelado y poder acudir el día 12 al Pleno del Parlament de Cataluña.
El plazo elegido parece indicar que Llarena frustrará la convocatoria señalada para el nuevo intento de investidura en Cataluña, fijado para las 10.00 horas del lunes. En instrucción penal todos los días son hábiles, según han explicado fuentes jurídicas, por lo que el plazo máximo para que las acusaciones den a conocer oficialmente su postura al juez concluye el mismo lunes en el que el Pleno ha sido convocado por el presidente del Parlament, Roger Torrent.
Paralelamente, este mismo miércoles el Tribunal Constitucional ha rechazado excarcelar al que fuera presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) mientras estudia el recurso de amparo que éste ha presentado contra la medida cautelar que dictó el pasado 16 de octubre contra él la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela. En su auto, el TC argumenta que acceder a la puesta en libertad equivaldría al "otorgamiento anticipado del amparo solicitado", por lo que lo deniega por unanimidad.
