Torres se opone a que su mujer y él sean imputados por un delito de blanqueo

Actualizado: lunes, 24 marzo 2014 18:11

PALMA DE MALLORCA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

Diego Torres, exsocio de Iñaki Urdangarin al frente del Instituto Nóos, ha remitido un escrito al juez José Castro en el que vuelve a oponerse a su imputación y a la de su mujer, Ana María Tejeiro, por un presunto delito de blanqueo de capitales en el marco del caso Nóos, una solicitud que cursó el sindicato Manos Limpias y que el magistrado desestimó el pasado 11 de marzo.

Así lo han informado fuentes jurídicas a Europa Press, que han precisado que la entidad rebate en su escrito los argumentos esgrimidos por Manos Limpias en el recurso de reforma con el que la entidad impugnó la decisión del juez. La Fiscalía ya se opuso al encausamiento de todos ellos al alegar que ya han sido interrogados por este supuesto delito.

En su escrito, la defensa de Torres, ejercida por el letrado Manuel González Peeters, se remite al contenido del anterior documento que presentó para oponerse a la imputación por blanqueo de sus patrocinados. En aquel escrito, enumeraba hasta 71 argumentos en contra de la imputación de Tejeiro al contraponer la actuación de ésta al papel ejercido por la Infanta Cristina al frente de Nóos y de la sociedad de la que es copropietaria junto a su marido, Aizoon.

Entre otros alegatos, el abogado hacía referencia a los gastos personales en que incurrieron los Duques a través de Aizoon o la presunta mediación del Rey don Juan Carlos en favor de iniciativas promovidas por Urdangarin. Así, haciendo alusión velada en más de quince ocasiones al Monarca o a la Casa Real, el letrado subraya cómo en ningún documento de Hacienda figura una donación por parte de su padre de 1,2 millones de euros "sin ninguna previsión para pagar impuesto de sociedades".

"Ningún funcionario de la Hacienda Pública ha asesorado a Tejeiro para pergeñar que una donación fuera transparente y presuntamente camuflarla como préstamo", incidía el letrado al respecto.

Asimismo, en un duro escrito de once páginas, González Peeters proseguía con las comparaciones entre Tejeiro y Doña Cristina al recalcar que "no es el padre" de la primera "quien durante la recepción del Día de la Hispanidad, el 12 de octubre de 2007, le comunica a ella y a su marido que ha conseguido 110 millones de patrocinio para su proyecto de vela", en velada alusión a la iniciativa Ayre impulsada por el Duque.

En esta misma línea, el letrado sostenía que "no fue una amiga entrañable del padre de Tejeiro", en alusión a la noble alemana Corinna Sayn Wittgenstein por su relación de amistad con el Rey, "quien propuso presidir la Fundación Laureus". Y es que, según uno de los numerosos correos entregados por Torres al juez, Urdangarin pedía a Corinna formar parte de la fundación de ésta, la Fundación Laureus, por recomendación del Rey don Juan Carlos.

Mientras tanto, el letrado asevera que no fue Tejeiro quien se encontró con la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y con el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps, "en la entrega de los premios Salvador de Madariaga en Valencia en 2004, y comentó con ellos la posibilidad de celebrar allí el Valencia Summit", evento deportivo por el que el Instituto Nóos percibió hasta 3,6 millones de euros públicos, de los que, según la Agencia Tributaria, únicamente gastó a tal efecto 910.668 euros.

LOS ARGUMENTOS DE MANOS LIMPIAS

Por su parte, Manos Limpias sostiene que el entramado societario urdido en torno al Instituto Nóos para supuestamente desviar los fondos obtenidos de las Administraciones, "no tendría sentido" sin la presencia de Aizoon, y apunta a que Urdangarin, Torres y Tejeiro "detrajeron presuntamente de las arcas públicas una gran cantidad de dinero que desviaron a sus arcas privadas a través de una trama de sociedades que permitió tal desviación", de la que formaba parte la propia Aizoon como una de las mercantiles que permitieron "vaciar ilegalmente los fondos del Instituto Nóos".

La representación procesal de Manos Limpias subraya que los hechos por los que debe ser ampliada la imputación en el caso de Urdangarin se concretan en la disposición que ha realizado del dinero de Aizoon que de forma presuntamente irregular provino de Nóos. Unos fondos que, alega, siguen estando en las arcas de Aizoon y cuya utilización a partir de la entrada en vigor de la reforma del Código Penal de 2010 podría constituir un delito de blanqueo.