El alcalde de Villava (Bildu) defiende ante el juez que quiso "defender los derechos de los presos"

Kirio Gastearena a la salida de la Audiencia Nacional
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 13 marzo 2013 13:42

Declara en la Audiencia Nacional imputado por enaltecimiento del terrorismo tras participar en el brindis a un etarra


MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Villava (Navarra), Kirio Gastearena, de la coalición Bildu, ha declarado ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que nunca quiso enaltecer el terrorismo durante un acto que se celebró el pasado 6 de octubre tras el chupinazo de las fiestas patronales y que su intención era la de "defender los derechos de los presos".

Gastearena ha declarado este miércoles como imputado por un delito de enaltecimiento del terrorismo por participar en un acto en el que se celebró un brindis por varios presos etarras, entre ellos el etarra 'Txetxu' Barrios, condenado por el asesinato en enero de 1998 del concejal del PP en Sevilla Alberto Jiménez Becerril y su esposa, María Ascensión García Ortiz.

A las puertas de la Audiencia Nacional, el regidor ha reconocido que realizó unas manifestaciones "a título personal" durante el acto, que estaba organizado por la asociación de apoyo a los presos etarras Herrira, pero que no nombró a nadie en concreto sino que pidió "respeto" para los reclusos que están cumpliendo condena. Además, reivindicó la vuelta al pueblo de uno de los etarras que cumple condena en Francia.

El alcalde, que ha contado con el apoyo de los diputados de Amaiur Sabino Cuadra e Iker Urbina, ha considerado "totalmente incomprensible" su imputación y ha asegurado que se trata de "una cortina de humo para tapar los casos de corrupción que afectan a Unión del Pueblo Navarro (UPN)". "La normalización no llega pese al cese de la actividad armada de ETA", ha lamentado.

El alcalde de Villava, según un informe enviado a la Audiencia Nacional por la Delegación del Gobierno en Navarra, detallaba que también participó en esas fechas en un acto en la localidad de Burlada en el que se pidió la liberación de otro preso etarra, en este caso José Miguel Almandoz Erviti.