PAMPLONA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
La autopsia practicada este miércoles al fallecido ayer en las dependencias de la Policía Nacional de Pamplona descarta la presencia de signos de violencia, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN).
Se van a practicar estudios complementarios tanto toxicológicos como histopatológicos (estudio microscópico de los órganos) para concluir con mayor grado de certeza la causa de la muerte. Por este motivo, se van a remitir muestras al Instituto Nacional de Toxicología de Barcelona para su estudio y análisis.
El fallecido fue detenido este martes por agentes de la Policía Nacional y poco después, sobre las 14 horas, falleció en las dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Navarra. Esperando a ingresar en los calabozos, los agentes se dieron cuenta de que no respiraba.
Había sido arrestado después de que los agentes que realizaban un servicio de seguridad ciudadana en la calle Marcelo Celayeta de Pamplona vieran a una motocicleta circulando en 'zig zag'. Al proceder a darle el alto para su identificación, el posteriormente detenido se bajó de la moto y "sin mediar palabra agredió al policía". Mantuvo, según ha informado la Policía, una actitud "violenta" tras su arresto, "realizando una resistencia activa, llegando a morder a uno de los agentes".
Durante su traslado a la Jefatura Superior disminuyó su agresividad y permaneció "aparentemente tranquilo". "Dejó de hablar y de colaborar con los agentes, no haciendo caso a los requerimientos que le realizaban", ha añadido la Policía en una nota.
Una vez en el parking de comisaría, "hubo que sacarlo del vehículo en brazos, puesto que el detenido no colaboraba con los agentes, introduciéndolo en la Jefatura por la puerta habilitada al efecto, hasta el lugar destinado a los detenidos que van ingresar en los calabozos".
En dicho lugar se procedió al cacheo superficial y se le encontró en el bolsillo una bolsa de plástico blanca que contenía otras cinco bolsas más pequeñas con "una sustancia de color pardo, presumiblemente heroína". Finalizado el registro, regresó al banco momento en el que se dieron cuenta de que no respondía y parecía que había perdido el conocimiento.
Uno de los policías comprobó el pulso y la respiración y observó, según la nota policial, que no respiraba y carecía de pulso. Se comunicó inmediatamente a la Sala del 091, "solicitando urgentemente una ambulancia, a la vez que iniciaba la reanimación, con masaje cardiaco". Se acercó también el desfibrilador existente en la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano de la Jefatura Superior de Policía, y "mientras seguían las instrucciones para activarlo, se personó en el lugar una ambulancia que continuó con las maniobras de reanimación".
La investigación está siendo dirigida por la titular del juzgado de instrucción número 5 de Pamplona, en función de guardia.
