PAMPLONA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Economía, Hacienda, Industria y Empleo del Gobierno de Navarra, Lourdes Goicoechea, ha considerado que en estos momentos "la mejor solución" para la situación "delicada" de Faurecia sería que la planta de Burlada permaneciese abierta por los menos hasta diciembre de 2016, ya que hasta esa fecha tiene contratada la fabricación de un producto.
Así lo planteó el Ejecutivo foral en la reunión que mantuvieron este jueves los representantes de los trabajadores, la dirección y miembros del Gobierno para analizar el anuncio de cierre de la planta de Burlada, que cuenta con 190 trabajadores.
Según ha detallado Goicoechea, a preguntas de los periodistas, en el encuentro el Ejecutivo planteó como "una posible salida" a la situación de Faurecia que la empresa siga fabricando hasta diciembre de 2016 un producto del cual tienen contrato hasta esa fecha.
De este modo, ha detallado, a lo largo de 2015 "con prejubilaciones y colocaciones se podría prescindir de una parte del personal que hiciera que la producción pudiera seguir y que se garantizara que la fábrica por lo menos siga abierta de momento 2015 y 2016 para ver si se puede hacer un plan de reconversión hacia otro producto".
"La posición de la empresa en cuanto a que sea un cierre definitivo es una decisión bastante tomada", ha relatado la consejera, si bien ha destacado que "por lo menos" la empresa expresó en la reunión la posibilidad de analizar este planteamiento en la mesa de negociación.
Según ha expuesto la consejera, parece "difícil" que se pueda alcanzar "un punto de encuentro" entre la dirección y los trabajadores, pero ha incidido en que no le parece "mal" que se estudie la posibilidad de que "haya una producción hasta diciembre de 2016 y mientras ver si a la empresa se le puede dotar de otros contenidos".
"Hemos tenido casos de este tipo de empresas que soportaron ese momento y ahora están funcionando francamente bien. Es una situación delicada y lo que hay que intentar buscar es la mejor solución, que yo creo que la supervivencia durante dos años de la planta sería la mejor", ha reiterado.
Por otro lado, la consejera ha contado que en la reunión pareció "quedar claro" que "es verdad que esta empresa ha perdido una serie de contratos con compañías que hasta hora les fabricaba las correderas para los asientos" y que "al haber perdido trabajos con General Motors y otras compañías la producción de aquí no se puede garantizar".
"Todos tenemos que ver cuál es la situación real, una situación complicada porque la empresa tiene una decisión bastante firme, lo que tenemos que hacer es intentar reconvertirla a la mejor de las soluciones para los trabajadores", ha declarado Goicoechea.
Según ha explicado, "ellos el producto no lo fabrican directamente para los fabricantes de automóvil, sino que lo que funcionan es comprando grandes módulos para su producción y luego ensamblándolos". "Con quien tienen que llegar a un acuerdo es con ese cliente que ellos tienen que a su vez es un proveedor de los fabricantes de automóvil. Ahí se podía trabajar para consolidar esa producción", ha agregado.
EL GOBIERNO TRABAJARÁ PARA DEFENDER LOS PUESTOS DE TRABAJO
Por otro lado, preguntada por si el Gobierno estaría dispuesto a meterse en empresas y asumir gastos, Goicoechea ha contestado que el Ejecutivo "lo que tiene que estar es para apoyar en esa defensa de los puestos de trabajo, como lo hemos hecho en otras empresas, pero esto tiene que llevar un proceso".
"Primero tenemos que saber hacia dónde tenemos que ir y qué es lo que se plantea. En esa negociación entre la empresa y los trabajadores se irá viendo qué problemas son los que surgen y ahí es donde el Gobierno tendrá que estar para ver si con algún apoyo por parte del Ejecutivo se puede conseguir que eso siga adelante. Y por supuesto que ahí estaremos", ha concluido.
